
Tensión bélica
Mark Rutte, secretario general de la OTAN: "Un misil ruso tarda solo diez minutos más en llegar a Madrid que a Varsovia"
Las últimas declaraciones de Rutte han contribuido a alimentar el temor social por una posible guerra a gran escala

La tensión bélica a nivel internacional se ha intensificado en los últimos meses, y el temor a una guerra a gran escala se ha convertido en un escenario que cada vez más expertos y líderes políticos consideran posible. Los altos responsables de la OTAN y la Unión Europea han manifestado su preocupación ante el deterioro de la seguridad global, mientras las relaciones entre las principales potencias se vuelven cada vez más hostiles.
A ello se suma la recomendación de la Unión Europea a sus Estados miembros en la que insta a los ciudadanos a prepararse para una posible crisis, adquiriendo un kit de supervivencia con suministros básicos para al menos tres días; un movimiento que se ha interpretado como una señal de que el riesgo de un conflicto mayor no es una mera especulación, sino una posibilidad real que debe ser considerada.
El secretario general de la OTAN alerta de la siniestralidad de la situación
En este contexto, las recientes declaraciones de Mark Rutte, secretario general de la OTAN, han contribuido a alimentar el temor social, ya que estas han sido percibidas como un reflejo de la creciente preocupación en el seno de la Alianza Atlántica sobre la estabilidad global y los desafíos en materia de seguridad que enfrenta Europa.
"Odio esta idea de tener una OTAN a dos nieveles, en la que de alguna manera los ocho países del flanco oriental son diferentes de los otros 24 aliados", comenzaba exclamando el secretario general de la Alianza Atlántica, haciendo alusión a las disputas entre los aliados del este y el resto.
Sin embargo, las declaraciones más contundentes han sido aquellas en las que ha ejemplificado la devastación a la que se expone el mundo occidental tal y como lo conocemos en la actualidad que, en caso de contienda a gran escala, quedaría destruido con apenas unos minutos de diferencia.
"Con la última tecnología de misiles, desde Rusia, la diferencia entre un ataque a Varsovia o un ataque a Madrid es de 10 minutos. Así que todos estamos en el flanco oriental: Ámsterdam lo está, Londres también e incluso Washington", ha aseverado con contundencia Rutte, con unas declaraciones que no han pasado desapercibidas.
No obstante, aunque las autoridades insisten en que todas las medidas que se están implementando desde la OTAN y la UE tan solo son medidas preventivas y no de una respuesta a una amenaza inminente, la combinación de discursos alarmantes y recomendaciones concretas de preparación ha generado una sensación de incertidumbre y desasosiego en la ciudadanía.
✕
Accede a tu cuenta para comentar