Alemania
Un refugiado sirio con motivos antisemitas atacó al turista español en Berlín
La Policía registra las habitaciones de un alojamiento para refugiados en la ciudad oriental de Leipzig
La Fiscalía alemana cree que el sospechoso arrestado el viernes por apuñalar a un joven turista español de 30 años en el Monumento al Holocausto, en el centro de Berlín, tenía una motivación religiosa, concretamente antisemita. El detenido es un refugiado sirio de 19 años que, según las autoridades, habría declarado esto a la policía y que, hasta el momento, no tenía antecedentes policiales. Al parexer, el agredido tenía heridas en el cuello, fue operado de urgencia y está fuera de peligro.
El joven había ingresado en Alemania en 2023 y, al parecer, residía en el estado este de Sajonia. En su mochila se encontró el arma, siempre según informaba la policía, y una alfombra, un corán y un papel con versos del corán escritos en el mismo. Las mismas fuentes aseguran que el joven tenía el plan de "asesinar a judíos". Se le acusa de intento de asesinato y lesiones graves y una comisión de homicidios de la Oficina de Investigación Criminal de Berlín se encargará del caso a las órdenes de la Fiscalía General de Berlín.
La ministra del Interior, Nancy Faeser, calificó el ataque con cuchillo como un "crimen atroz y brutal" que tuvo lugar en un sitio de conmemoración y recuerdo a los judíos asesinados en Europa. "El agresor debe ser castigado con todo el peso de la ley y deportado directamente desde la prisión." El Estado utilizará "todos los medios posibles para expulsar a Siria a los perpetradores de actos violentos", explicó la ministra en funciones un día antes de las elecciones de este domingo. Sus promesas sonaban, por ello, mas que nada a anuncio electoral: "Quien comete tales crímenes y abusa de la protección de Alemania de la manera más repugnante, ha perdido todo derecho a permanecer en nuestro país", expresó la ministra socialdemócrata en un tono más cercano a la extrema derecha de la AfD que a lo que suele expresar su partido.
El próximo gobierno tendrá que afrontar los retos de la inmigración y de ataques como éste, que en los últimos meses han aumentado. Los dos partidos en el gobierno, socialdemócratas y verdes han asegurado querer realizar más deportaciones, en especial de personas que cometan delitos. Los cristianodemócratas con su candidato Friedrich Merz han cambiado también su discurso en relación a la inmigración y prometen mano dura. El tema estrella de AfD, los ataques islamistas, los atentados y las agresiones con cuchillo han sido también tema de la contienda electoral del nuevo partido BSW, con lo que en la práctica existe un consenso al respecto.
Sin embargo, el próximo gabinete tendrá que aclarar varias cuestiones. Aún no se ha decidido cómo se va a cooperar con los islamistas que han llegado al poder en Siria tras el derrocamiento de Bashar Al Ashad. Además, en Afganistán tampoco hay acuerdos de repatriación con los talibán. De hecho, este sábado se conocía a través del medio Business Insider, que la embajada de Alemania en Tayikistán ha alertado del aumento de solicitudes de visados y de asilo de afganos que podrían llevar a un colapso del sistema en dicho lugar.