Socialismo autoritario

¿Cómo definiría la actual situación política que vive Venezuela?

–Es una situación de intensa confrontación de dos fuerzas políticas que representan a dos partes de la sociedad venezolana y no parece que vayan a encontrar un punto de encuentro . Parece altamente difícil. La única posibilidad sería a través de la mediación, pero el Gobierno se resiste y ha rechazado incluso el ofrecimiento de la Iglesia católica, de la Universidad venezolana y de la propia OEA.

¿Y cuál es el riesgo que existe ahora?

–Se puede llegar a una situación de conflicto imprevisible porque, en mi opinión, es la situación más grave que vive Venezuela desde el paro petrolero de 2002, cuando la violencia inundó las calles y obligó a un proceso de negociación con la mediación del entonces secretario de la OEA, César Gaviria

¿A qué atribuye el enrocamiento de Maduro para no querer dialogar con la oposición?

–Puede que intente doblegar a la oposición por la fuerza y el uso de las amenazas, como ocurrió en el episodio de violencia de la Audiencia Nacional y el recorte presupuestario en el estado de Capriles, en Miranda, para que no lleve a cabo su programa electoral. Pero también que tenga en su agenda la radicalización en el plano político y esté entrando en una fase de «socialismo autoritario»

¿Es más dura la política de Maduro respecto a la oposición que la del propio Chávez?

–Diría que no tiene nada que ver con lo que Chávez pensaba porque el anterior presidente nunca vulneraba los procedimientos constitucionales y aceptaba los resultados electorales. Reconocía sus derrotas y nunca negó el derecho a expresarse de los diputados de la oposición.

¿Y qué está logrando el Gobierno con esta actitud?

–El Gobierno está llevando al país a un alto grado de radicalización y sólo el aumento de la presión internacional, de la Unión Europea en su conjunto, de Naciones Unidas y de países vecinos como Brasil podría hacerle reaccionar.

¿En el seno del chavismo hay sectores críticos con la deriva de Maduro?

–Sí. Hay un sector del chavismo que está propiciando favorecer el diálogo con la oposición y parece que podría haber reuniones entre Unidad Democrática y el Partido Socialista Unido de Venezuela.