¿Sólo una amenaza?

l ¿Por qué han elegido esta fecha para la prueba?

–La han hecho coincidir a propósito con el discurso del presidente Obama sobre el Estado de la Unión. Hicieron lo mismo en 2006, cuando escogieron el 4 de julio, Día de la Independencia de EE UU, para el lanzamiento de un misil de largo alcance. También en 2009 realizaron su segundo ensayo nuclear durante el Memorial Day. Creo que es una prueba más de que intentan llamar la atención de Washington.

l ¿Por qué juegan otra vez a la amenaza nuclear?

–La llamada «paciencia estratégica» que ha desplegado Obama con Corea del Norte ha dejado a Pyongyang en un segundo plano durante cuatro años. La verdad no es demasiado «estratégica», porque ha permitido que el país siga con sus pruebas nucleares y de misiles. Esa paciencia le ha dado tiempo para trabajar duro en la miniaturización de las cabezas nucleares para sus misiles.

l ¿Cuál es el papel de Kim Jong Un? ¿Está detrás de este desafío?

–Nada sucede sin que pase por el despacho de Kim Jong Un, de modo que claramente está detrás de este movimiento. Quizá quienes han rescatado la idea del desafío nuclear haya sido su tío, Chang Song Taek, y los altos militares que lo rodean.

l ¿Tiene algo que ver su «carrera» como dictador en esta decisión?

–Su carrera no está bajo amenaza porque tiene el apoyo de un gran grupo de veteranos y de la élite de Pyongyang, cuya legitimidad sigue fundamentada con la dinastía Kim y Kim Il Sung, el fundador del país y héroe de la resistencia contra Japón. Si Kim Jong Un desaparece, es la élite la que se encontraría en problemas, porque es demasiado joven para buscarle sucesor. Es mejor pensar en este país como una monarquía antes que como un Estado comunista. Sin «familia real» no se legitima el sistema.

l ¿Ha cambiado algo en la situación humanitaria del país últimamente?

–Está mejor que hace quince años, cuando murieron millones de personas de hambre, pero sigue siendo mala. Sus líderes no tienen excusa para justificar el hecho de no conseguir alimentar a su gente debidamente, porque Corea del Norte podría tener unas altas tasas de desarrollo.