España

«Soy republicana de toda la vida, pero Trump no me representa»

Los votantes americanos en España. D’Orazio, original de Santa Monica, desconfía de las soluciones fáciles del magnate

Nombre: Debra D’ Orazio. Edad: 65 años. Partido: Republicano. Profesión: Voluntaria
Nombre: Debra D’ Orazio. Edad: 65 años. Partido: Republicano. Profesión: Voluntarialarazon

D’Orazio, original de Santa Monica, desconfía de las soluciones fáciles del magnate

A pesar de ser de Santa Monica, California, allí se aburría, por eso en el año 71 se vino a estudiar un año a España, pues «Europa era el centro neurálgico del mundo». Debra D’Orazio, una de los 29.188 estadounidenses empadronados en nuestro país, siempre ha votado a los republicanos, a los Bush, a McCain... pero Donald Trump no le convence en absoluto y «no representa a la mayoría de los republicanos». «El problema es que por la coyuntura mundial se ha dado voz a organizaciones como el Tea Party y el populismo está en aumento. Cuando los gobiernos no pueden asegurar la seguridad absoluta ante el Estado Islámico, estos grupos ofrecen soluciones fáciles y simplistas».

En este sentido, también le preocupa que Trump tiene una ambición excesiva y poca ética para conseguir sus éxitos y objetivos. D’Orazio hubiera preferido a un candidato como Paul Ryan, «pero el portavoz de los republicanos en la Cámara de Representantes, ya tiene una posición muy importante». No va a votar por Trump porque se queda tranquila con que el Congreso siga siendo republicano, que es donde se toman las decisiones. «Y es que en estas elecciones no sólo se vota al presidente, también muchísimas ‘‘propositions’’ clave. La democracia en EE UU es muy dinámica, participamos en todo, los jueces del distrito, fiscales, congresistas...», remarca la californiana, que habla perfectamente español.

Tras trabajar en varias multinacionales y marcharse a París con su segundo marido, al jubilarse, se fueron a vivir a Asturias y al fallecer él, ella volvió a Madrid para estar cerca de sus dos hijas. Aquí es voluntaria de Cáritas. D’Orazio asegura, a pesar de haber sido la campaña más ordinaria y vacía de contenido que recuerde, que estas elecciones son muy importantes por la elección de los jueces del Tribunal Supremo. Hay una vacante, y muchos tienen más de 80 años. «Estos magistrados toman decisiones que afectan directamente a la vida de los estadounidenses». Quizá en el aborto libre a nivel federal, sea donde más choca con Hillary Clinton, algo que de tener jueces de mayoría demócrata podría llevarse a cabo.

De la candidata demócrata tampoco le convence su pasado oscuro, antes de que Bill fuera presidente, ni su actitud como primera dama: «Se creía demasiado importante y ya tenía en mente que en el futuro llegaría a la Casa Blanca. No cabe duda de que es una mujer muy preparada e incluso más inteligente que el ex presidente Clinton», explica D’Orazio, para quien su animadversión por Trump ha hecho que no vea en la candidata demócrata un gran mal. «Existen aspectos positivos, sobre política exterior y la posición de EE UU en el mundo. Tampoco me gusta que Trump haya recurrido a Rusia para espiarla». Sobre Hillary, al haber sido secretaria de Estado y senadora, «podemos saber todo de ella, pero Trump tiene un pasado privado que le beneficia», sentencia.