Guerra
Trump presiona a Putin para firmar el alto el fuego
Kyiv espera medidas firmes de EE UU al Kremlin si rechaza la oferta mientras que la ayuda militar estadounidense ya se ha reanudado
Los ucranianos quieren paz y se lo han demostrado al presidente de EE UU, Donald Trump, al aceptar la propuesta de una tregua provisional de 30 días, aunque desconfían de Rusia en medio de los continuos ataques rusos.
«He enfatizado repetidamente: ninguno de nosotros confía en los rusos, ya lo hemos intentado antes (establecer una tregua duradera)», afirmó el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, a la prensa ayer mientras discutía los resultados de las negociaciones entre las delegaciones de Estados Unidos y Ucrania en Arabia Saudí.
Según Kyiv, Rusia violó 25 veces los acuerdos de Minsk de 2014 y 2015, que buscaban trazar un camino para poner fin a la guerra en Donbás, antes de lanzar la invasión a gran escala hace más de tres años.
«Es importante para mí terminar la guerra. Quiero que el presidente de Estados Unidos y los estadounidenses lo vean, que Europa y todos los demás lleguen a un acuerdo de que se debe hacer todo lo posible para obligar a Rusia a poner fin a esta guerra», señaló, sin embargo, el jefe de Estado.
Si Rusia acepta la tregua, Ucrania necesitará ayuda para garantizar su cumplimiento, ya que sabe «con quién está lidiando», afirmó Zelenski. Estos 30 día de cese de los enfrentamientos se utilizarían para desarrollar un plan que alcance una solución a largo plazo, con garantías de seguridad confiables para Ucrania como eje central de cualquier negociación futura.
En este sentido, Ucrania nunca aceptará que «se limite su independencia ni que se vulnere su Constitución», subrayó Zelenski. «No es fácil para nosotros luchar contra un enemigo así, pero estamos peleando por nuestra independencia, por lo que no reconoceremos ningún territorio ocupado por la Federación Rusa», destacó el presidente en particular. Si el Kremlin rechaza la oferta de la tregua, Ucrania espera «medidas firmes» de Estados Unidos. «Aún no conozco los detalles, pero estamos hablando de sanciones y de fortalecer a Ucrania», explicó Zelenski.
El líder ucraniano confirmó que tanto él como Trump estuvieron muy involucrados en las conversaciones en Yeda (Arabia Saudí) el pasado martes y reiteró que Ucrania está lista para firmar un acuerdo sobre minerales.
Sin embargo, reveló que por ahora no hay planes para una posible reunión con Trump. «Realmente quiero que cualquier reunión sea positiva. Para ello, todos deben prepararse y advertir sobre el formato del próximo encuentro», destacó Zelenski.
Según fuentes ucranianas y estadounidenses, Estados Unidos ha reanudado el envío de equipos militares a Ucrania y el intercambio de inteligencia sobre el campo de batalla. Esto incluye equipos prometidos o contratados por la administración presidencial anterior, especificó el analista militar Mikola Bielieskov. Donald Trump no ha anunciado hasta ahora ninguna ayuda militar adicional al país invadido, aunque es crucial que Ucrania continúe recibiendo miles de millones en misiles de defensa aérea, proyectiles de artillería y otros equipos en los próximos años, como había planeado Joe Biden.
De hecho, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, señaló ayer que ahora depende de Rusia la entrada en vigor de una tregua en la guerra de Ucrania, un día después de que el Gobierno ucraniano aceptara un alto el fuego de 30 días y aseguró que una delegación estadounidense va camino de Rusia. «Tendremos un alto el fuego total cuando entre en vigor. Ahora depende de Rusia, pero tenemos una buena relación con ambas partes», expresó en declaraciones a la prensa en la Casa Blanca junto al primer ministro irlandés, Micheál Martin.
En resumen, «las negociaciones en Yeda se convirtieron en un éxito diplomático para Ucrania», escribe el politólogo Oleksandr Sushko. Sin embargo, el país entra en una «gran incertidumbre», cuya navegación requerirá «una habilidad diplomática extraordinaria, paciencia estratégica y coordinación», advierte, así como, «argumentos desde el campo de batalla». No en vano, «Ucrania debe estar preparada para más cambios en la actitud de Trump, cuya ingenuidad o afinidad con Putin siguen siendo preocupantes», advierten muchos. Las preguntas centrales siguen las mismas: «¿Qué pasa con las garantías de seguridad para Ucrania, los cascos azules, el papel de Europa, la ayuda adicional a Ucrania? El verdadero trabajo duro está por venir», escribió Volodimir Dubovik, de la Universidad de Odesa.
Hasta ahora, la única respuesta de Rusia ha sido más bombas, misiles y drones, así como asaltos a lo largo del frente. Una mujer murió y 14 civiles resultaron heridos el miércoles en un ataque con misiles balísticos contra Kryvyi Rig, la ciudad natal de Zelenski y un centro industrial en el corazón de Ucrania.