Un desequilibrado atropella a once personas en nombre de Alá en Francia

Dijon vivió ayer unas horas de horror cuando hacia las ocho de la tarde un automovilista atropelló de forma deliberada a los viandantes en el centro de la ciudad. El hombre arrolló a once personas en cinco accidentes distintos, y algunos testigos aseguraron que le habían oído gritar «Alá es grande» y «en nombre de los niños de Palestina». El hecho de que la víspera otro hombre atacara la comisaría de Joué-lès-Tours y agrediera a tres policías al mismo grito hizo saltar todas las alarmas al temer que se tratara de un nuevo atentado siguiendo los métodos sugeridos por el portavoz del Estado Islámico, Abou Mohamed al-Adnani, que pide a sus seguidores matar al mayor número posible de infieles, con los métodos que sean, incluido el atropello de la gente.

Sin embargo, el conductor de Dijon, que se había dado a la fuga, pudo ser detenido poco después por la Policía, que confirmó que el hombre, de 40 años, «presenta un perfil desequilibrado y está siendo tratado en un hospital psiquiátrico» El portavoz del Ministerio del Interior, Pierre-Henry Brandet, se mostró muy prudente sobre las motivaciones del agresor, que, en principio, actuó en solitario. Brandet dijo que era «demasiado pronto para hacer una conexión» entre los dos sucesos. En unas declaraciones a France Info, precisó que los testimonios de los que habían oído al agresor gritar el nombre de Alá eran «bastante confusos», y necesitaban ser confirmados por la investigación, así como su capacidad de «discernimiento» en el momento de los hechos. El autor era conocido por la Policía por delitos de derecho común cometidos en los años noventa.

Manuel Valls expresó de inmediato su apoyo a los ciudadanos de Dijon a través de Twitter: «Solidaridad con las víctimas de Dijon y apoyo a las familias». De los once atropellados, nueve resultaron heridos leves y dos de gravedad, con traumatismo craneal, pero sus vidas no corren peligro. El ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, volvió a comparecer en televisión anoche para tranquilizar a los ciudadanos y anunciar que habían reforzado el plan de vigilancia antiterrorista. Confirmó que el agresor de Joué-lès-Tours se había convertido al islam recientemente y parecía «muy misterioso y muy inestable». La investigación de la Fiscalía de París, al cargo del caso, se orienta hacia la pista islamista.