Andalucía

El impuesto de Sucesiones cae un 35%, la recaudación general crece un 3,5%

La Junta ha superado los 7.840 millones de ingresos por tasas directas e indirectas de la mano en gran parte del consumo, uno de los argumentos del Gobierno «del cambio» a la hora de suprimir de facto el tributo, y que también está frenando la recesión en la comunidad

El consejero de Hacienda, Juan Bravo / Foto: Manuel Olmedo
El consejero de Hacienda, Juan Bravo / Foto: Manuel Olmedolarazon

La Junta ha superado los 7.840 millones de ingresos por tasas directas e indirectas de la mano en gran parte del consumo, uno de los argumentos del Gobierno «del cambio» a la hora de suprimir de facto el tributo, y que también está frenando la recesión en la comunidad

El 9 de abril se aprobó vía decreto ley el fin de facto del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, con la bonificación del 99% del gravamen, culminando uno de los principales acuerdos del pacto de Gobierno entre PP y Cs con el apoyo parlamentario de Vox. El presidente Juanma Moreno lo definió como un tributo «injusto y limitador del desarrollo». Según los datos oficiales de la recaudación tributaria de la Junta, hasta junio (último dato publicado) se han recaudado 97,14 millones, una reducción del 35,20% en relación a los 149,9 millones acumulados hasta el mismo mes de 2018, ya con una reforma impuesta por Cs al Gobierno socialista de modo que sólo pagaban las herencias por persona (de padres a hijos) de más de un millón de euros. El Gobierno «del cambio» calificó la de Sucesiones y Donaciones como una tasa «injusta» al tratarse de «un doble gravamen» –esto es, se volvía a pagar sobre bienes sobre los que se tributa «durante toda la vida»– que además provocaba «un éxodo» hacia comunidades como Madrid. A la hora de exponer su eliminación de facto, el presidente, el vicepresidente y el consejero de Hacienda defendieron que el dinero que se quedaba «en los bolsillos de los ciudadanos» repercutiría en el consumo y, pese a la caída de la recaudación en este aspecto, el montante general crecería. La recaudación por impuestos directos acumulada a junio de 2019 es de 2.577.608.661 millones, un 6,81% más que en el mismo ejercicio a estas alturas. Los indirectos crecen un 1,36%. El total arroja un crecimiento de los fondos de un 3,16%, hasta los 7.602,9 millones, que se eleva hasta el 3,51% considerando otros ingresos de derecho público, con un total de 7.840 millones recaudados.

Un impuesto de escaso recorrido real como el de los Depósitos Bancarios (que apenas quedó en un guiño electoral en la época más dura de la crisis) cae definitivamente un 100%, mientras que el año pasado se habían recaudado 4.379 euros. Por el IRPF se ha sumado un 9,56% más (2.577,6 millones). Crece casi un 70% el montante del Impuesto de Patrimonio (hasta los dos millones). En la línea de supresión de cargas, baja casi un 10% Transmisiones Patrimoniales y casi un 5% Actos Jurídicos Documentados, así como el tipo autonómico del Impuesto sobre Hidrocarburos (-49,34%). Por el contrario, sube la recaudación en Actividades de Juego No Presenciales (+27,43%); el IVA (casi un 5%); los Impuestos Especiales de Fabricación (+3,63%); el de Determinados Medios de Transporte (+28,55%); y los Ecológicos (+20,85%). En total, la recaudación por los impuestos indirectos crece el citado 1,36%. El Observatorio Económico de Andalucía viene señalando durante los dos últimos trimestres que el consumo interno está frenando una posible recesión en la comunidad, que, por otra parte, ya se empieza a vislumbrar en parámetros como los del desempleo (con un aumento en agosto), las venta de viviendas de segunda mano (un -0,2% de variación mensual) y las exportaciones (con un «leve descenso del 0,6% respecto a enero-junio de 2018).

El Presupuesto de este año contempla una recaudación por el Impuesto de Sucesiones de Donaciones de algo más de 309 millones. La estimación, de no alcanzarse, puede quedar compensada con el crecimiento general de la recaudación. Todos los meses de este año, la recaudación ha sido superior en relación al año previo y «sin considerar las cantidades correspondientes a liquidaciones de ejercicios anteriores por las diferentes figuras tributarias cedidas gestionadas por el Estado». En el supuesto de que todas las declaraciones fuesen devengadas en el año natural, la previsión de caída de recaudación rondaba los 38 millones, según la estimación de la Consejería de Hacienda. En lo que queda de año, la reducción estimada es de 18 millones; 15,8 millones en 2020 y 8,7 millones en 2021 favoreciendo a unos 10.000 afectados. El ahorro para el contribuyente en estos tres ejercicios se calcula en 42,5 millones. Otro de los beneficios ponderados por la administración con la eliminación de la tasa es que afloren operaciones antes a espaldas del fisco y que ahora pasan a tributar al 1%.

Pese a los «nubarrones» a los que recientemente se refirió el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, en su primera reunión a tres bandas con sindicatos y empresarios, el líder del Ejecutivo andaluz anunció que las previsiones de crecimiento económico para la comunidad, fijadas en el Presupuesto de 2019 en un 2,2% del PIB, se revisarán al alza hasta «lo más cerca posible del 2,5%». Fuentes de la Consejería de Hacienda apuntan a un 2,4%.