Andalucía

El papiloma humano, a debate: vacunas para niñas y... ¿también para niños?

Estudios revelan una evolución del VPH en enfermedades que afectan por igual a hombres y mujeres

Las chicas entre 12 y 18 años pueden solicitar gratuitamente el tratamiento en su centro de salud / Manuel Olmedo
Las chicas entre 12 y 18 años pueden solicitar gratuitamente el tratamiento en su centro de salud / Manuel Olmedolarazon

Estudios revelan una evolución del VPH en enfermedades que afectan por igual a hombres y mujeres

La salud pública unió a Adelante Andalucía y al Gobierno de la Junta en la sesión del Pleno del Parlamento del pasado 27 de junio. Inmaculada Nieto, diputada de Adelante Andalucía, puso sobre el atril la situación de las vacunas y, más concretamente, argumentó la efectividad de la vacuna de la gripe para mayores de 65 años y acabó con una petición en relación al papiloma humano en la que reclamó la vacunación de los niños varones y no solo una inmunización de las niñas.

En relación a lo expuesto por Nieto, el consejero de Salud, Jesús Aguirre, aseguró compartir su «preocupación» y recordó que está entre los planes de la Consejería «mejorar la cobertura de las vacunas, sobre todo en adolescentes en papilomavirus y meningococo y vacunación antigripal en personas en condiciones de riesgo de cualquier edad».

El debate sobre si se debe vacunar a los niños para luchar contra el virus del papiloma humano (VPH) está cobrando cada vez más fuerza y ya no solo en España sino en el resto del mundo. Recientemente el Reino Unido, tras un informe favorable realizado por su Agencia de Salud, ha decidido aprobar la vacunación para los niños varones. En otros países como Estados Unidos, Canadá o Australia también se está comenzando a hacer. Entonces, si más de una veintena de países ya lo hacen, ¿qué sucede en Andalucía y por qué ahora se plantea la vacunación a los niños cuando era algo «exclusivo» de las niñas? «La respuesta es muy sencilla», sentencia David Moreno, director del plan de vacunación de Andalucía, «el primer descubrimiento que hicimos del papilomavirus es que provocaba, tanto a hombres como a mujeres, infecciones leves como verrugas o lesiones genitales pero, después, nos dimos cuenta de que era el causante del cáncer de cuello de útero, por lo que al ser exclusivo de las mujeres y tratarse de una patología más importante nos decidimos a vacunarlas a ellas».

Respecto a los hombres, «también pueden padecer el VPH, pero se dieron casos de patologías más leves», explica Moreno. La diferencia reside en que con los años el virus ha evolucionado al igual que las relaciones sexuales. «En los últimos veinte años se ha diversificado la práctica sexual, ahora hay mucho más sexo oral o anal que antes por lo que ha aumentado mucho el cáncer a estos niveles y eso es un descubrimiento actual, de los últimos 15 años», aclara Moreno. Este virus, según se ha podido comprobar con diferentes estudios que se han realizado recientemente, «afecta tanto al hombre como a la mujer, aunque sin saberse muy bien las razones se ha comprobado que el hombre transmite más el virus que la mujer». De ahí que la duda de la vacunación esté ahora mismo encima de la mesa. Actualmente una agencia que se dedica a analizar los medicamentos y vacunas está estudiando si se debe vacunar a los varones o no del virus del VPH. «Saldrá en unos meses y entonces tomaremos la decisión en Andalucía», concluye el director del plan de vacunación andaluz.

La estrategia que se sigue en la Comunidad consiste en vacunar antes de mantener las primeras relaciones sexuales, por lo que se establecen los «12 años como la edad ideal» aunque «vacunar más adelante también es bueno», argumenta. El problema radica en que, en palabras de Moreno, «nuestro programa de vacunación solo puede sostener el rango de edad entre los 12 y los 18 años, más allá no podemos hacerlo salvo que estemos ante algún factor de riesgo».

Con esto no se pretende crear una alarma social sobre este virus. «No todas las relaciones sexuales contagian del VPH, pero la vacuna sí te protege de todos los tipos de virus de papiloma que hay», tranquiliza Moreno. La única diferencia con otras enfermedades de transmisión sexual es que para el virus del papiloma «necesitamos una vacuna, ya que hemos comprobado que el preservativo no protege al cien por cien de esta enfermedad» y continúa «el condón, por ejemplo, es muy eficaz para enfermedades como el sida (VIH) pero no tanto con el papilomavirus, por ello recomendamos la vacunación para su prevención».