Toros

Diego Ventura

Sanfermines cigarreros

La Razón
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Quién iba a pensar que en Sevilla se pudiera instaurar un encierro taurino. Convertir un pueblo de Andalucía en un pequeño San Fermín, eso es lo que ha logrado el torero José Antonio Morante con la ayuda del Ayuntamiento de La Puebla del Río. Porque las fiestas del patrón San Sebastián se han tornado en un gran acontecimiento. Desde el encierro para los más pequeños del día anterior, hasta la novillada celebrada este fin de semana. Sin olvidar, el chupinazo del futbolista Joaquín y el encierro con novillos de Zalduendo. La presentación del cartel de las fiestas patronales en Fitur anunciaba, de alguna manera, el auge que podía tomar. Como bien había escrito el concejal de Cultura del pueblo cigarrero, Rogelio de la Carrera, La Puebla presentó en la Feria Internacional del Turismo su vinculación con el proyecto «Territorio Toro», a través de las distintas fincas que poseen plazas de tientas: la Mínima de Escobar, El Rincón de Diego Ventura, La Huerta de San Antonio, La ganadería de los hijos de Dolores Rufino (una de las más antiguas de la cabaña brava), el castillo palacio Los Montes de los Duques de Maqueda o el Rancho El Rocío, que este año celebra su veinticinco aniversario en el turismo de congresos y convenciones. A esto hay que añadir toda su artesanía en torno al mundo del toro y del caballo, sus famosos zahones, monturas, cabezadas o los capotes y muletas de las principales figuras que Juan Carlos Morante cose desde su taller San Sebastián. Todo es especial en La Puebla del Río. Joaquín hizo una de sus genialidades. Y Morante, de chófer para llevar a los enanitos toreros hasta la plaza de toros. Una fiesta que crece y se hace grande. Enhorabuena a Ricardo Mateo y al alcalde, Manuel Bejarano.