Siete veces más parados de larga duración que antes de la crisis

En la comunidad hay 476.000 personas que llevan dos años o más en situación de desempleo y han agotado las prestaciones. En 2007 eran 69.000 en esta situación extrema.

Andalucía, como el resto de España, se encuentra en una fase de recuperación económica. Atrás quedaron los años «horribilis» de la crisis –2008, 2009, 2010...– que arrasaron completamente el mercado laboral y duplicaron la tasa de paro hasta situarla por encima del millón de personas. El Producto Interior Bruto (PIB) ha vuelto a crecer a ritmos del tres por ciento, ha mejorado la recaudación tributaria, con sus dos pulmones principales que son el IVA y el IRPF –lo que ha permitido este año una bajada de dos puntos con un impacto de 120 millones de euros–, y el sector turístico, que representa el 13 por ciento de la economía, se mantiene fuerte, con récord histórico de visitantes.

Sin embargo, la radiografía laboral sigue siendo un aguafuerte con más sombras de las deseadas. La región, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) conocidos la semana pasada, tiene siete veces más parados de larga duración en situación extrema que antes de la crisis. Estas personas llevan buscando un trabajo dos años o más y por tanto han agotado las prestaciones por desempleo que les corresponden.

Así las cosas, entre abril y junio 476.700 personas se encontraban en esta situación en la comunidad, lo que representa un 41,1 por ciento del total. La EPA del segundo trimestre de 2007, justo antes de que comenzara la subida encadenada del paro, ofrecía unos datos muy diferentes. Los registros apuntan a que en ese momento un total de 69.400 personas en la comunidad se encontraban en esta situación, lo que representaba el 15,7 por ciento del total de los parados.

Porcentualmente no hay gran diferencia entre Andalucía y el resto de España. En términos absolutos obviamente sí. En todo el territorio nacional –siempre según los datos de la última EPA– casi dos millones de personas (1.959.600) llevaban dos años o más en situación de desempleo, el 42,8 por ciento del total. Esto supone ocho veces más de las que existían en España en esta situación antes de la crisis. Concretamente, 229.100, según la EPA del segundo trimestre de 2007.

Esta situación de paro de larga duración afecta prácticamente de manera análoga a los dos sexos, aunque, contra lo que pudiera esperarse, algo menos a las mujeres, que sumaban entre abril y junio más de 248.000 en la comunidad.

También es muy abultada la franja que va de un año a menos de dos años en situación de desempleo. En este caso la EPA contabiliza 175.000 personas en Andalucía, lo que supone el 15,1 por ciento del total de los desempleados. Por otra parte, 135.400 parados llevan entre tres meses y menos de medio año buscando trabajo. Representan el 11,7 por ciento del montante global.

El paro, asimismo, se está cebando con personas de todos los niveles educativos. De hecho, en Andalucía los que están sin trabajo y tienen educación superior suman más de 215.800, el 18,6 por cierto del total. Por el contrario, los que tienen estudios primarios incompletos suponen 52.000, esto es, el 4,5 por ciento del global. Asimismo, con la segunda etapa de la Educación Secundaria se contabilizan 112.900 (el 9,7 por ciento).

El grueso de los parados andaluces se localiza en el nivel de la primera etapa de Secundaria. Suman casi medio millón, concretamente 498.500, un 42,9 por ciento.

La situación en este aspecto no cambia sustancialmente respecto al resto de España, aunque Andalucía está por encima de la media en esta franja de estudios. El número de parados con la primera etapa de la Educación Secundaria supone en España el 39,8 por ciento, más de 1,8 millones de personas en términos absolutos.

En España sí son más que en Andalucía los que tienen estudios superiores y están en el paro. Suponen el 22,1 por ciento del total, más de un millón. Prácticamente uno de cada cuatro, frente a uno de cada cinco de la comunidad andaluza.

Andalucía tiene actualmente 1.161.100 parados, según la Encuesta de Población Activa del segundo trimestre, 28.100 personas menos que en el trimestre anterior. El desempleo bajó en este periodo un 2,37 por ciento. Sin embargo –y aquí es donde inciden las voces más críticas sobre la falta de pulso de la comunidad– en el conjunto de España la bajada fue casi del doble: un 4,5 por ciento. La tasa de paro es del 29,07 por ciento en la región. Sólo Melilla (36,84) aventaja a Andalucía en este funesto guarismo.