El codirector de Atapuerca pide que los científicos «socialicen» sus investigaciones

Uno de los codirectores de los yacimientos arqueológicos de la sierra de Atapuerca, Eudald Carbonell, defiende que los científicos no se pueden limitar a investigar y deben trabajar también para "socializar"sus investigaciones.

En una entrevista con Efe, Carbonell considera que los científicos no se pueden encerrar en una "torre de marfil"y pensar que la investigación es "de pocos y para pocos".

Aunque reconoce que los científicos son "un grupo minoritario y privilegiado", se muestra convencido de que "todos, toda la sociedad, debemos disfrutar de los resultados de su trabajo", y eso es "la socialización científica".

En este sentido, ha puesto como ejemplo el proyecto Atapuerca, que es "un buque insignia en la investigación mundial sobre evolución humana", pero también un proyecto social que genera una gran cantidad de información, tanto en publicaciones especializadas como en medios generalistas.

Carbonell advierte de que, junto con la "socialización del conocimiento", los proyectos científicos deben tener también un componente de formación académica para seguir formando a científicos.

En su opinión, la crisis económica de los últimos años ha supuesto "un frenazo"en el desarrollo científico que tardará años en recuperarse, porque la falta de recursos ha hecho que no se incorporen apenas nuevos investigadores, y "la población investigadora ha envejecido", mientras muchos jóvenes valores trabajan en proyectos fuera de España.

Los recortes han afectado también al proyecto Atapuerca, al bajar el ritmo de incorporación de nuevos investigadores, lo que ha provocado que el Centro Nacional de Investigación sobre Evolución Humana y los centros de interpretación próximos a los yacimientos no hayan llegado a "la velocidad de crucero"que se esperaba.

En el caso de los yacimientos, Carbonell se muestra convencido de que, tras dos años de campañas de excavación con menos investigadores y trabajos durante solo un mes, se recuperará el ritmo para la campaña del próximo verano, y adelanta que la duración de la campaña será de mes y medio y trabajarán en los yacimientos unos 200 investigadores.

Carbonell asegura que los próximos años seguirán siendo especialmente fructíferos en Atapuerca, aunque el objetivo de excavar en extensión en el nivel TD-6 de Gran Dolina, donde esperan encontrar un gran volumen de restos de "Homo antecessor", una especie descrita solo en Atapuerca.

En 1994 aparecieron en ese nivel algunos restos que en principios se fecharon hace 780.000 años, aunque estudios posteriores apuntan a que el homínido más antiguo de Europa, el que se conoce como "primer europeo", debió vivir en la sierra de Atapuerca hace 900.000 años.

Carbonell cree que el límite de antigüedad de vestigios de la presencia de homínidos en Atapuerca se situará en un millón y medio de años.

La gran asignatura pendiente en Atapuerca, reconoce Carbonell, es la localización de restos de neandertales. Sin embargo, está convencido de que terminarán apareciendo, porque ya han encontrado sus herramientas en la Galería de las Estatuas y restos de sus hogares en algunos yacimientos al aire libre.