El nuevo presidente de la Diputación de León, en la «senda» de Carrasco

El hasta ahora vicepresidente de la Diputación de León, Marcos Martínez, ha tomado posesión hoy como máximo responsable de la institución tras el asesinato de Isabel Carrasco el pasado 12 de mayo e inicia una nueva era de continuidad, en la que exigirá más autonomía y buscará fondos en la UE.

Martínez, que ha sido elegido por dieciocho votos a favor y seis en blanco, ha afirmado durante su discurso que continuará con la "senda"iniciada por Carrasco, que fue presidenta los últimos siete años.

El nuevo presidente de la Diputación, ante un abarrotado salón de plenos y en un acto que ha arrancado con un minuto de silencio por la política leonesa, ha defendido el papel cercano de la institución y ha exigido una "mayor autonomía administrativa, económica y política"para "devolver a los pueblos lo que han dado durante décadas a los leoneses".

Ha asegurado que la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local debe configurarse como el mecanismo que asigne competencias a ayuntamientos y diputaciones siempre y cuando se garantice la correspondiente financiación, para que se pueda fortalecer el municipalismo.

Además, ha hecho un "llamamiento"para solventar "a corto plazo"los problemas de financiación de las entidades locales porque "es de justicia".

Ha indicado que la diputación buscará fondos en la Unión Europea para "paliar de algún modo los recortes"que han aplicado otras administraciones a la provincial, porque el marco europeo "ofrece oportunidades de financiación y ayudas que están por explorar"y no va a perder "la oportunidad".