Castilla y León

Los servicios esenciales no se recortarán a pesar de las amenazas de Montoro

La vicepresidenta Rosa Valdeón invita al ministro a «que diga dónde hay que quitar, porque no hay margen y es imposible reducir nada»

La vicepresidenta Rosa Valdeón antes de explicar los acuerdos del Consejo y valorar las exigencias de Montoro
La vicepresidenta Rosa Valdeón antes de explicar los acuerdos del Consejo y valorar las exigencias de Montorolarazon

La vicepresidenta Rosa Valdeón invita al ministro a «que diga dónde hay que quitar, porque no hay margen y es imposible reducir nada»

Los servicios esenciales «no se recortarán» en Castilla y León, a pesar de las amenazas del ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro. Así lo confirmaron tanto la vicepresidenta Rosa Valdeón como la consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo.

La número 2 del Gobierno Herrera, en la rueda de prensa posterior al Consejo, invitó al ministro a «que diga dónde hay que quitar, porque no hay margen y es imposible reducir nada».

En este sentido, insistió en que para la Junta «los castellanos y leoneses son lo importante», y por este motivo, «no se va a rebajar la calidad en su atención». La vicepresidenta reiteró que «Castilla y León no va a negar ni renunciar a más Sanidad, Educación y Servicios Sociales, son prioritarias».

Rosa Valdeón afirmó que «nos negamos a que las Comunidades Autónomas sean culpables de la desviación del déficit, pero Castilla y León mucho menos» y reiteró que la «decisión política» del Ejecutivo autonómico es «clara» y no se trata de «una defensa gratuita» sino una respuesta a un objetivo de déficit «inalcanzable» e «imposible de cumplir».

Asimismo, explicó que el problema parte de un modelo de financiación autonómica «insuficiente e injutos» que no cubre los servicios esenciales y de un reparte de déficit «irracional».

En la misma línea, Pilar del Olmo aseguró que, en estos momentos, la Junta «no está en disposición de recortar de ningún sitio». Además cifró en 328 millones la retención que le ha exigido el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, cantidad que corresponde a la liquidación positiva del ejercicio de 2014.

La consejera de Economía y Hacienda también criticó también criticó que las grandes líneas del presupuesto fueron remitidas en tiempo y forma al Ministerio de Hacienda, que en ningún momento puso problemas a su aprobación, «por lo que ahora, una vez que nuestras cuentas han sido fiscalizadas, no deberíamos hacer ningún ajuste adicional, simplemente deberíamos controlar y evitar que el gasto no fuera superior a lo presupuestado».

Del Olmo afirmó en que no existe margen para cambiar unas cuentas que está muy «medido y calibrado» y que destina el 80 por ciento de sus recursos a servicios públicos fundamentales, por lo que no descartó pedir un plan de ajuste al propio Ministerio para que «sea el propio Cristóbal Montoro quien nos diga de dónde recortamos».

Insistió en que la «Junta no se niega a cumplir ninguna disposición legal», pero recalcó que el simple control de la ejecución presupuestaria en 2016 serviría para cumplir con el objetivo de déficit. A su vez, la consejera apuntó que la propuesta del Gobierno de España está siendo analizada con detenimiento por parte de los técnicos y los servicios jurídicos de la Consejería de Economía y Hacienda, «dado que utiliza muchos argumentos legales».

A su vez, Pilar del Olmo criticó que antes de remitir estas cartas, el ministro Montoro debería haber convocado el Consejo Fiscal y Financiero, informa Ical.