Populares y socialistas, juntos en las Cortes por el empleo y los pueblos

El Debate de Política General deja un mensaje claro: las Cortes están para aportar soluciones a los castellanos y leoneses. Dos parlamentarios de raza como Juan Vicente Herrera, presidente de la Junta y máximo responsable de los populares en Castilla y León, y Óscar López, un parlamentario práctico y de solvencia contrastada, sellaban, tras tiempo de negociación, un acuerdo que clarifica las bases de la Ordenación del Territorio de Castilla y León. Un asunto mollar en el programa de legislatura que presentó hace dos años Herrera y que se agilizará durante este verano gracias a ese pacto, que determinará salvaguardar a los pueblos de Castilla y León y garantizar los servicios básicos que reciben.

Algo que quedará, negro sobre blanco, en la futura Ley de Ordenación, Servicios y Gobierno del territorio, que culminará con una unidad -también en el Parlamento- que, pese a que presumía atisbarse con el pacto que se firmó el secretario autonómico del PSOE, Julio Villarrubia, en octubre del año pasado, no cuajó según lo esperado y ahora retoma, desde el partido del puño y la rosa, el portavoz Óscar López.

Defensa de la autonomía local, mantenimiento de servicios públicos esenciales que se prestan en la actualidad o la definición de unidades básicas de atención concurren como las principales cuestiones a plasmar en un documento que persigue definir, tras años de idas y venidas, la mejor manera para gestionar un territorio que agrupa 94.000 kilómetros cuadrados -más que Austria o Chequia- y engloba a 2.248 municipios.

Un acuerdo, el firmado por Junta y el PSOE en el Parlamento, con la venia del PP, que incorpora algunas exigencias del principal partido de la oposición. La primera, la referida a la reapertura de las urgencias nocturnas en hasta 17 consultorios locales, a los que se echó el cierre por criterios de eficiencia el pasado otoño. En ello ya trabaja un grupo de trabajo en las Cortes, que también debe abordar un nuevo plan de empleo, que se llevará al Diálogo Social, focalizado en los jóvenes y los pueblos para 2014, para el que el Presupuesto General de la Comunidad autónoma debe reservar 30 millones de euros.

La senda de la recuperación

El pacto fue el resultado de un Debate sobre el estado de la Comunidad plagado de manos tendidas, que inició Herrera con un discurso en el que avanzó algunos de sus retos de aquí al verano que viene. Buena parte de ellos con el empleo en la mirilla.

Así, Juan Vicente Herrera destacó que dirigirá un millón de euros para el fomento de puestos de trabajo en las zonas mineras, dada la difícil situación que atraviesan.

De igual manera, de cara a fomentar la creación de iniciativas y apoyar a los emprendedores, la Junta podrá en marcha una deducción fiscal en el tramo autonómico del IRPFdel 20 por ciento por el importe de adquisición de acciones en la creación de empresas o la ampliación de su capital. ADE Rural será otra de las soluciones para impulsar la actividad en los pueblos castellanos y leoneses. Se presentará en los próximos días y, al igual que la futura Ley Agraria, estará en marcha en el otoño de este año. Por entonces, también verá la luz una Estrategia de Apoyo Integral al Sector Agroalimentario castellano y leonés. Antes de que concluya 2013 la Junta persigue rebajar al mínimo trámites y facilitar la apertura de negocios, dado que hay muchas expectativas puestas en el autónomo y el emprendedor. Por eso, se aprobará el Programa de Apoyo a la Creación de Empresas. Ahora bien, una de las claves de futuro puede estar en la reforma del Servicio Público de Empleo de Castilla y León -el concurrido Ecyl- que busca ganar en eficacia y en resolución de procesos. Igualmente, puede ser determinante el Programa de Mejora de la Formación Profesional.

Herrera hizo referencia a la necesidad de alcanzar un nuevo Acuerdo marco para la Competitividad y la Innovación Industrial, y anunció la creación de una oficina tecnológica y de búsqueda de financiación. En su empeño por hacer de la investigación y la innovación puntales estratégicos más allá de eslóganes, Herrera reiteró su intención de dar mayor pábulo al Centro de Investigación del Cáncer de Salamanca, uno de los valuartes de la ciencia no sólo en Castilla y León, sino en toda Europa. No esquivó Herrera, ni siquier, la crítica leal al Gobierno con asuntos como el de la minería, el futuro de Garoña, las becas universitarias -que Castilla y León mantendrá en el 5, contemplando niveles de renta-, o el IVA cultural, que se exigirá rebajar del 21 hasta el 10 por ciento.

Financiación autonómica

Pero fue especialmente incisivo Herrera en asuntos que preocupan mucho, porque afectan a los dineros que deriva el Estado a la comunidad. En concreto, la financiación autonómica, que exigío huya del denominado «coste estándar» y el criterio meramente poblacional, además de volver a reiterar la importancia de incorporar en ella un servicio mal financiado desde sus orígenes como la Dependencia.

En lo referido a la reforma de las administraciones, Castilla y León seguirá con su reestructuración del sector público y con las puertas abiertas a nuevos acuerdos con el Estado.