Trepidante tercer encierro en Cuéllar, con numeroso público y sin sobresaltos

Tranquilidad en el tercero de los encierros de Cuéllar. Y es que tras dos intensos días cargados de incidentes, el numeroso público asistente tanto en el campo como en las calles de la localidad segoviana, por fin pudo disfrutar de un bonito y trepidante encierro, con buenas carreras de los mozos por el casco urbano y, lo que es mejor, sin heridos que reseñar, salvo un joven de 27 años que fue trasladado al Complejo Hospitalario de Segovia con un traumatismo en el tórax.

Cinco de los seis novillos de La ganadería Coquilla Sánchez Arjona, premiada el año pasado por los aficionados en Cuéllar, entraban en la plaza gracias al buen hacer de los más de cuatrocientos caballistas que les llevaron no sin dificultades por el campo, aunque un animal que quedaba rezagado finalmente no lo hacía y tenía que ser sedado.

El alcalde de Cuéllar, Jesús García, confiaba en que a partir del encierro de ayer, la localidad pueda rceuperar la normalidad después de que, el domingo, un hombre de 63 años, vecino de Rentería (Guipúzcoa), falleciera de una cornada en el corazón el primer encierro, y tres animales perdieran la vida el lunes al caer desplomados por agotamiento.

Los restos mortales del fallecido, J.M.R.B., que disfrutaba temporadas de descanso en la Villa segoviana junto a familiares, fueron ayer trasladados a su localidad natal, Rentería, una vez que su viuda recibió las autorizaciones judiciales.