Baja la inmigración mientras crece la población china

Un total de 1.023.398 personas extranjeras están censadas en Cataluña, un 13,6 por ciento de la población total y un 0,5 por ciento menos que las que había en 2015, según los datos definitivos del Padrón Municipal de Habitantes a 1 de enero de 2016.

Un total de 1.023.398 personas extranjeras están censadas en Cataluña, un 13,6 por ciento de la población total y un 0,5 por ciento menos que las que había en 2015, según los datos definitivos del Padrón Municipal de Habitantes a 1 de enero de 2016 que ayer hizo públicos el Instituto de Estadística de Cataluña. La población de origen europeo es la más numerosa y representa un tercio de todos los extranjeros (33,3 por ciento), seguida de la africana (28,2 por ciento) y de los americanos (24,2 por ciento), mientras que los originarios asiáticos representan un 14,2 por ciento del total de extranjeros y es el colectivo que más creció en 2015.

Los marroquíes, con 211.384 personas; seguidos de los rumanos, con 90.874; los chinos, con 54.545; los italianos (49.421), los paquistaníes (43.093), los bolivianos (32.734), los franceses (31.716), los ecuatorianos (28.667) y los colombianos (24.373) son los colectivos más abundantes en Cataluña, donde están censadas personas de un total de 166 nacionalidades.

El descenso de población extranjera, 4.671 personas menos que en 2015, también ha contabilizado a las que han obtenido la nacionalidad española. Según el Idescat, la disminución de la población extranjera se refleja en la mayoría del territorio, aunque hay un grupo de seis comarcas y el Vall d’ Aran que registran incrementos, de diferente intensidad. Osona (con un aumento del 4 por ciento), la Segarra (2,6 por ciento) y el Moianès (2 por ciento) son las que ganan más población extranjera, mientras que las que pierden más son el Pallars Jussà (-7,4 por ciento), el Montsià (-7,1 por ciento) y el Pallars Sobirà (-7,1 por ciento).

A 1 de enero de 2016, las comarcas con más presencia de población extranjera son el Alt Empordà (24,9 por ciento), la Segarra (24,8 por ciento) y el Baix Empordà (19,1 por ciento), seguidas por el Gironès, la Selva, el Segrià y el Pla de Urgell, con proporciones en torno al 18 por ciento. Las comarcas que tienen menos presencia de población extranjera son el Moianès (7 por ciento), el Berguedà (7,2 por ciento), Anoia (7,6 por ciento) y el Ripollès (7,7 por ciento).

Los municipios que proporcionalmente tienen más población extranjera son Guissona (49,1 por ciento) y Castelló d’Empúries (44,6 por ciento), seguidos de Sant Pere Pescador (38,5 por ciento), la Portella (37,9 por ciento) y Salt (37,4 por ciento). La población marroquí es la primera nacionalidad en 26 comarcas de Cataluña, mientras que la rumana lo es en 10 comarcas y en el Vall d’Aran, y en el Barcelonès la nacionalidad más numerosa es la paquistaní; en la Garrotxa, la india; en el Moianès, la maliense; en el Alt Urgell, la portuguesa, y en la Cerdanya, la boliviana.

En relación con el censo de 2015, los extranjeros, según el continente de origen, disminuyen, excepto los asiáticos, que se incrementaron en 5.435 personas. La población que disminuye más es la americana (- 5.558 personas, que representan el -2,2 por ciento), fundamentalmente por la reducción de población de América del Sur (-4,4 por ciento), ya que las procedentes de América del Norte y de América Central aumentaron en un 4,7 por ciento y un 9,9 por ciento. En el caso de la población africana, la reducción es de 2.579 personas.