Barcelona limitará las plazas de aparcamiento en nuevos edificios

Los inmuebles protegidos tendrán un estacionamiento por cada cuatro viviendas.

La guerra del Ayuntamiento de Barcelona contra el coche continúa. El gobierno municipal ha colocado ahora en su punto de mira la construcción de plazas de aparcamiento, que piensa limitar de forma muy significativa con el objetivo de lograr «una movilidad más sostenible». Las actuales normativas prevén un mínimo de «una plaza por cada vivienda de más de 130m² o una plaza por cada dos viviendas de 80m² a 130 m² y una plaza por cada cuatro viviendas menores de 80 m²». Este mínimo pasará a ser el máximo, según la modificación del Plan General Metropolitana aprobado en la comisión de Urbanismo del Ayuntamiento.

Los límites afectarán a todo tipo de nuevas promociones, no sólo a la de vivendas privadas. Los edificios protegidos, por ejemplo, pasarán a tener una plaza de aparcamiento por cada cuatro pisos (actualmente se prevé un mínimo de una plaza por cada piso); y los de viviendas dotacionales –los que la administración cede a unos promotores durante un tiempo limitado– no tendrán parking. La caída más drástica, sin embargo, afectará a los centros comerciales, ya que todos aquellos que tengan una superficie inferior a 1.300 m² no podrán contar con aparcamiento, mientras a que los que cuenten con 1.300-2.500 m² podrán construir una plaza por cada 65 m².

En Barcelona hay 640.000 plazas de aparcamiento subterráneo, una cifra excesiva según el gobierno municipal. En los últimos 25 años, el número de plazas fuera de la calzada ha crecido en 300.000, doblando así las que había en el año 1992. Las normas de entonces se redactaron con el criterio de que había un déficit

La nueva planificación ha salido adelante con el apoyo de BComú, PSC y CUP y la abstención de ERC y Ciutadans.