Medio Ambiente
La Generalitat prohibirá las bolsas de plástico gratuitas
La medida que se enmarca en el pacto firmado por el gobierno catalán, los fabricantes y el sector comercial para reducir en 2020 en un 90 % el consumo de estos productos.
La nueva normativa que ultima el Govern obligará a los comercios catalanes a cobrar a sus clientes por estos productos
Desde 2009, cuando la Agencia de Residuos de Cataluña (ARC), los fabricantes de bolsas de plástico y las asociaciones de la distribución comercial firmaron el Pacto por la Bolsa, Cataluña se ha mostrado muy comprometida en la tarea de reducir el consumo de las bolsas de plástico de un solo uso en el ámbito comercial. De hecho, desde 2007 y hasta 2012, esta comunidad autónoma pasó de un consumo per cápita de estas bolsas de 327 unidades anuales a las 156 unidades. En esta misma línea, hace apenas una semana, se reeditó dicho pacto y ahora la Generalitat prohibirá por ley a todos los comercios dar gratuitamente este producto a sus clientes.
El objetivo es el de reducir el consumo de las bolsas de plástico de un solo uso en un 90% en 2020, por lo que a través de un proyecto de ley de mediadas fiscales, administrativas, financieras y del sector público -o dicho de otra manera, ley de acompañamiento a los presupuestos- el gobierno catalán ha modificado la norma vigente relativa a los residuos para prohibir a los establecimientos comerciales la oferta gratuita de bolsas de plástico de un solo uso a sus clientes, tanto en la misma tienda como en la actividad de reparto a domicilio.
Si bien es cierto que ya hace unos años que muchos comercios catalanes cobran a sus clientes por las bolsas, sobre todo los grandes establecimientos como supermercados o centros comerciales, hasta ahora éstos lo hacían por un compromiso voluntario con el medio ambiente, sin embargo, a partir de la aprobación de los Presupuestos de la Generalitat, todos los comercios, grandes y pequeños, estarán obligados a llevar a cabo esta práctica por ley.
Retraso involuntario
Inicialmente y según los planes del gobierno autonómico, el objetivo era aprobar esta modificación de la normativa de residuos a principios de 2016, pero ante las dificultades para alcanzar un acuerdo para formar Gobierno en Cataluña tras las elecciones autonómicas celebradas en septiembre de 2015, las circunstancias han obligado a aplazar su aprobación.
En cualquier caso tal y como señaló el Consejero de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat, Josep Rull tras la reedición del Pacto de la Bolsa hace una semana, «Cataluña apuesta desde hace años por una gestión de residuos que prima la reducción de la generación y potencia la máxima recuperación», en este caso concreto, de bolsas de plástico de un solo uso, que además de consumir importantes recursos en su proceso de producción, generan otros impactos sobre el medio ambiente.
A modo de ejemplo, según datos que maneja la Generalitat de Cataluña, se estima que en el fondo del Mediterráneo hay unos 250 mil millones de pequeñas piezas de plástico, mientras que en la superficie del agua flotan en torno a 500 toneladas adicionales de residuos de plástico.
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