Cataluña

Comín promete reducir dos meses la espera en cirugía si hay cuentas

Salut supedita la reducción de las listas en un 50% a la aprobación de unos Presupuestos en el Parlament

El conseller de Salut, Toni Comín, presentó ayer con el director del CatSalut, David Elvira, un plan integral para reducir las listas de espera, que dijo el conseller, está sujeto a la aprobación de nuevos presupuestos
El conseller de Salut, Toni Comín, presentó ayer con el director del CatSalut, David Elvira, un plan integral para reducir las listas de espera, que dijo el conseller, está sujeto a la aprobación de nuevos presupuestoslarazon

Mientras el conseller de Salud, Toni Comín, espera a que Cataluña se convierta en un estado independiente, la panacea que permitiría «recuperar los 1.000 millones que necesitamos para acabar con las listas de espera», trabajará para reducirlas, al menos, en un 50%.

Para hacer posible esta actuación, prevista dentro del plan de choque acordado con la CUP y cifrada en 96 millones, Comín advirtió que primero es necesario aprobar unos nuevos presupuestos. «Con una situación de prórroga presupuestaria no dispondremos de 100 millones adicionales y por lo tanto este compromiso no se podrá hacer efectivo», aseguró ayer el conseller. En todo caso, desgranó ayer el proyecto diseñado para descongestionar la sanidad catalana y animar, así, a los grupos a favorecer unas nuevas cuentas.

Actualmente hay más de 153.000 personas que esperan a ser intervenidas. Si bien es cierto que los casos más graves, como las operaciones oncológicas y las cardíacas se realizan normalmente dentro de los plazos garantizados, hay otras dolencias consideradas de prioridad baja que no se llevan a quirófano hasta pasado el año después del diagnóstico. Tal es el caso de las 1.700 personas que sufren obesidad mórbida o de las 3.400 con lesiones vertebrales en la comunidad. Las 21.000 que esperan a ser intervenidas de cataratas, lo hacen menos días: una media de seis meses.

Para aliviar las demoras, Comín se comprometió a reducir en un 10% la espera en las cirugías, aumentando la actividad de los quirófanos en los centros del SISCAT con 20.000 operaciones más. Todo, con un coste de 74 millones.

El plan que presentó ayer el responsable del Departamento de Salud junto con el director del CatSalut, David Elvira, también prevé reducir en un 50% el tiempo medio de espera en pruebas diagnósticas con una partida de 8,4 millones. Más de 117.000 pacientes requieren una y por lo general no acceden a ella hasta pasados los 71 días. Si lo que necesitan es una colonoscopia, tienen que esperar mínimo tres meses o algo más en el caso de las endoscopias del esófago.

El atasco de las consultas externas es otro de los puntos negros de la sanidad y que Comín quiere gestionar. De los 656.924 ciudadanos que han pedido visitar un especialista, sólo la mitad lo hace dentro de los tiempos garantizados, que se traducen en una media de 163 días. Como ejemplo, un botón: de los 30.500 pacientes que tuvieron cita con el cirujano para ver si eran intervenidos en 2015, sólo la mitad la hizo efectiva en cinco meses. Para reducir drásticamente el tiempo de acceso a estos especialista, los médicos del CAP serán los que programen directamente las citas y gestionen el orden de acceso a estas. Además, se destinarán 13,6 millones a incrementar las consultas médicas.

Para hacer efectivas todas estas actuaciones, tal y como reconoció el conseller, también es necesario aumentar la plantilla de los centros sanitarios, que se redujo en 6.000 profesionales, sustituir las ausencias y pagar las horas extra, las mismas que se dejaron de abonar en 2009.