El desafío independentista

Junqueras admite que mantiene contactos con Santamaría

El vicepresidente del Govern prevé reunirse con su homóloga en el Gobierno en enero, con quien reconoce hablar «con frecuencia».

Junqueras, durante la celebración del pleno en el Parlament de esta semana.
Junqueras, durante la celebración del pleno en el Parlament de esta semana.larazon

El vicepresidente del Govern prevé reunirse con su homóloga en el Gobierno en enero, con quien reconoce hablar «con frecuencia».

Pese a que el independentismo exterioriza continuamente su escepticismo en torno a la voluntad de «diálogo y entendimiento» del Gobierno en esta nueva legislatura, la realidad acaba imponiendo un escenario totalmente distinto. Es más, los soberanistas muchas veces ponen a prueba esta predisposición para tratar de desmontarla: sin ir más lejos, el Día de la Constitución buscaron las cosquillas con la apertura de los ayuntamientos. Así, ayer el vicepresidente de la Generalitat admitió contactos con la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría.

Sí es cierto que el cambio de actitud no se ha dotado de contenido político –todavía no se ha pasado a los «hechos»–, pero los avances en las mejoras de las relaciones entre el Estado y la Generalitat son evidentes. La mejor constatación de ello es la sintonía entre Santamaría y Junqueras. El vicepresidente del Govern reconoció que habla «con frecuencia» con su homóloga en la Moncloa, lo que demuestra que la relación entre ambos dirigentes es fluida.

Esta relación más cordial entre vicepresidentes contrasta con la que mantienen el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. En este caso, los contactos no son tan constantes y aparentemente no gozan de la misma afabilidad. Y es que ayer también trascendió una llamada de Rajoy a Puigdemont de la semana pasada para invitarle a asistir a la Conferencia de Presidentes del próximo 17 de enero, aunque no presumiblemento no acordaron una fecha para una posible reunión. En cualquier caso, se puso de manifiesto que los contactos entre Generalitat y Estado son indudables.

Así, Junqueras aseguró ayer también que prevé una reunión con Santamaría para este mes de enero, aunque según detalló, todavía no hay fecha concreta, aunque descartó que se fuera a producir en diciembre porque «por la intensidad de las agendas, seguro que no se producirá». El número dos de la Generalitat explicó que «hace unos cuantos días» hablaron por teléfono «de cosas genéricas». Es más, como ejemplo de la cordialidad con Santamaría, reveló que un día le telefoneó para preocuparse por el estado de salud del diputado de ERC en el Congreso, Joan Tardà, que estaba hospitalizado tras ser operado de cadera.