Arquitectura

La inundación de los Encants deja una vez más en evidencia las obras municipales

Los vendedores se reúnen mañana con el Ayuntamiento

Un jubilado observa en la plaza de les Glòries cómo avanzan las obras del nuevo Mercat dels Encants
Un jubilado observa en la plaza de les Glòries cómo avanzan las obras del nuevo Mercat dels Encantslarazon

BARCELONA- El emblemático edificio azul del Fórum, proyectado por los aquitectos suizos Jacques Herzog y Pierre de Meuron, aguó la fiesta de las culturas al entonces alcalde de Barcelona, Joan Clos, tras amanecer con goteras, con el evento en marcha. Obras más discretas, como el dormitorio que los elefantes del zoo estrenaron el año pasado, con un coste de un millón de euros, también sufrieron goteras y otras más faraónicas, como el Estadio de Montjuïc, se inundaron antes de la inauguración, tras un aguacero en 1989. Al margen del bochorno, la reparación costó 735 millones de pesetas. El último desaguisado lo han protagonizado los nuevos Encants. A once días de su apertura, el chaparrón que cayó el sábado –20 litros por metro cuadrado en media hora–, inundó el edificio.

Las prisas, está claro, no son buenas compañeras. La cubierta, a 25 metros del suelo, no absorbió el agua y los codos de los bajantes se desprendieron. El sótano, donde está el aparcamiento y los almacenes, quedó anegado. El arquitecto responsable, Fermín Vázquez, del estudio B720, defendió que los cálculos de ingeniería aseguran que la cubierta está preparada para soportar chaparrones típicos del Mediterráneo.

Pero el incidente ha desmoralizado a los paradistas que han convocado para mañana una reunión urgente con el Ayuntamiento de Barcelona, los arquitectos y los constructores para pedir explicaciones. El vicepresidente de la asociación de comerciantes del mercado de los Encants Vells, Armand Colás, trasladó el malestar de los paradistas, «sorprendidos» por la inundación. Explicó que hace meses la parte central del nuevo mercado se había llenado de agua, pero entonces el techo no estaba acabado. Y aunque tenían previsto que los días de viento y lluvia, algunos puestos se podían mojar, era impensable un desastre como el del sábado.

Pese a que las obras no están todavía acabadas, está previsto que los nuevos Encants se inauguren el próximo 19 y abran al público el 21, apenas quedaba terminar cuatro detalles. Los operarios examinaron ayer el edificio para remendar los errores, después de que fuentes del Ayuntamiento hayan avisado de que exigirán a los responsables de la obra que la entreguen «bajo los niveles de calidad exigibles».

El presidente del grupo municipal del PP, Alberto Fernández, se avanzó ayer domingo a reclamar al alcalde de Barcelona, Xavier Trias, explicaciones por la «chapuza». Denunció que es «inadmisible» que un edificio que ha costado 55 millones de euros a las arcas municipales se inunde tras un aguacero antes de inaugurarse.

«Si las goteras hubieran aparecido tras abrir el nuevo recinto, los daños hubieran sido mayores, porque los paradistas habrían tenido género en los almacenes, es más, podrían haber sido irreversibles», lamentó.

Fernández ironizó con que Pasqual Maragall tuvo goteras en el estadio olímpico; Joan Clos, en el Fórum, y ahora Trias en el Mercat del Encants.