Lloret de Mar

Lloret lucha contra el «balconing»

Los hoteleros de la localidad refuerzan las medidas informativas tras tres nuevas víctimas este verano

Un joven salta desde el balcón de un hotel de Lloret de Mar
Un joven salta desde el balcón de un hotel de Lloret de Marlarazon

BARCELONA-Es un problema que se arrastra desde hace años y los hoteleros de Lloret han decidido tomar cartas en el asunto. Se trata del «balconing», una más que peligrosa actividad que consiste en saltar de balcón a balcón en los hoteles e incluso directamente a la piscina, aunque esté a más de 20 metros de altura. Los protagonistas son siempre jóvenes turistas, mayoritariamente ingleses o alemanes, y casi siempre en avanzado estado etílico. Los últimos veranos se han producido víctimas.

Este año no es una excepción. A estas alturas de verano ha muerto un joven y otros dos se encuentran en estado muy grave por culpe de esta práctica. Los hoteleros han dicho que ya es suficiente y se han reunido con representantes del Ayuntamiento, un grupo de expertos, los Mossos d'Esquadra y la Policía Local con el objetivo de hallar soluciones o por lo menos controlar al máximo esta actividad.

Una solución policial se antoja complicada. Consideran inviable destinar un mosso o un agente de la Policía Local a cada hotel susceptible de la práctica del «balconing». De momento, el sector de la hostelería ha decidido apostar por la prevención y aumentar el reparto de información entre los jóvenes turistas.

Convivencia

Están preocupados por la mala imagen que esta actividad ofrece de Lloret, localidad donde el turismo juvenil se analiza con lupa. Los hoteleros reparten en cada habitación ocupada por potenciales practicantes del «balconing» una revista. En sus más de 100 páginas se resaltan los valores de la convivencia y de unas vacaciones más de carácter familiar, lúdico o deportivo, alejadas de sus habituales excesos etílicos.

Ahora, también reparten dípticos entre los extranjeros. Estos folletos se dirigen exclusivamente a advertir de los riesgos del consumo excesivo de alcohol entre los ingentes grupos de jóvenes turistas ingleses, alemanes y franceses que cada verano llegan en masa a la turística localidad de la Costa Brava. El gerente del Gremio de Hosteleria de Lloret, Josep Franch, explica a LA RAZÓN que «los dípticos inciden en el sentido común, y repartiremos muchos más, porque estamos ofreciendo una mala imagen». Cabe destacar que los hoteleros rechazan en todo momento utilizar la palabra «balconing» y prefieren hablar de «accidentes».

Otra medida que han tomado tras la reunión es encargar un informe a los Mossos, que estará listo en septiembre, para que analicen exactamente la evolución del «balconing» en los últimos años, las víctimas, los heridos y cualquier tipo de detalle, incluyendo si alguno de los jóvenes se ha querido quitar la vida tirándose desde un balcón.

En Lloret de Mar, el 80 por ciento del turismo es familiar, mientras que el 20 por ciento restante son grupos de jóvenes. De momento, el Ayuntamiento y los hoteleros han visto cómo algunos miembros de este último grupo desconfían por completo de las campañas informativas que se llevan a cabo.

Problema etílico

Algunos jóvenes encuestados por el Consistorio, que aseguraron que ellos jamás practican el «balconing», afirmaron que «cuando uno va muy borracho, no se da cuenta de lo que hace, por lo que en ese momento las revistas y los dípticos cuentan muy poco». De todos modos, el sector de la hostelería no se da por vencido y no descarta incluso realizar modificaciones para que los balcones de los hoteles sean más seguros. Franch señala a este diario que de momento sólo es un proyecto, díficil de llevar a cabo por la cantidad de balcones.