Los Mossos detectan 14 falsos secuestros virtuales en tres días

Las llamadas eran aleatorias y para dar veracidad se utilizó a un menor que gritaba pidiendo ayuda.

Los Mossos d’Esquadra han detectado en tres días 14 casos de falsos secuestros virtuales en Badalona (Barcelona), en los cuales los extorsionadores realizan un gran número de llamadas aleatorias para amenazar a las víctimas de que harán daño a un familiar si no les hacen inmediatamente un ingreso inmediato de dinero.

En ninguno de estos 14 secuestros simulados detectados las víctimas han llegado a hacer el pago: en unos casos porque no dieron veracidad a la amenaza y, en otros, tras haber hecho llamadas de verificación desde su móvil, ya sea a la Policía o a sus hijos para comprobar que no les pasaba nada, han informado los Mossos este lunes en un comunicado. El «modus operandi» de todos estos casos ha sido el mismo: un hombre se puso en contacto con las víctima y, de una forma muy agresiva, les dijo que habían secuestrado su hijo y para darle veracidad usaron a un menor que gritando, llorando y pidiendo ayuda, simulaba ser la persona secuestrada.

La condición que ponían para liberar a las personas supuestamente secuestradas era hacer un ingreso que oscilaban entre los 5.000 y los 10.000 euros, aunque acababan aceptando importes menores con el fin de que la víctima pudiese conseguir el dinero en pocos minutos; las llamadas siempre se realizaban a teléfonos fijos.

Mantener la calma

Los Mossos piden que ante estos hechos las víctimas mantengan la calma y llamen al 112 y recuerdan la importancia de que no se facilite al extorsionador ningún tipo de datos personales y, si es posible, graben la conversación telefónica ya que puede ser útil para que los investigadores puedan identificar a los delincuentes.

En el transcurso del año 2016 se han producido en Cataluña 55 secuestros virtuales y se han imputado a ocho personas en Chile fruto de las gestiones de los Mossos y de otros cuerpos policiales españoles.

En los últimos meses ha habido una evolución en el modus operandi de estos delicuentes a la hora de realizar las llamadas por parte de los supuestos secuestradores, que han utilizado técnicas más agresivas. Este hecho se ha traducido en amenazas con un carácter más intimidatorio en cuanto a las consecuencias para el familiar en caso de que la víctima no haga el depósito en la cuenta bancaria como la extirpación de órganos o el contagio de enfermedades infecciosas.

El subinspector jefe de la unidad de investigación de Badalona, David Carrasco, explicó que esta última ola de llamadas e se ha intensificado el dramatismo de las llamadas, ya que al inicio «una voz femenina interviene chillando, llorando y pidiendo auxilio, lo que impacta mucho». Carrasco destacó que que «la sugestión ayuda a creerse la mentira», ya que ha habido casos en los que los afectados han identificado la voz como la de su hija a pesar de que no era ella.