Barcelona

Muere apuñalado un vecino de Sant Adrià tras protestar contra los okupas

Los Mossos detienen a los presuntos autores, dos jóvenes vinculados al movimiento

La Razón
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La policía catalana detuvo ayer a las dos personas acusadas de matar a un vecino de Sant Adrià del Besòs que participó en una protesta contra la actividad ilegal que se produce desde hace tiempo en los pisos «okupados» de esta localidad.

El lunes por la noche, alrededor de 200 personas salieron a la calle para denunciar la ocupación de pisos y los delitos que cometen sus inquilinos, entre ellos el tráfico de drogas. Una vez acabada la protesta, varios «okupas» acudieron al bar Porras de la Calle Berenguer, armados con un cuchillo para recriminar a varios manifestantes que estaban presentes en el establecimiento sus acusaciones.

Tras la refriega, dos de los habitantes ilegales, unos jóvenes de 18 y 20 años, mataron a un hombre rumano, de 30 años y padre de un hijo, que podría haber participado en la protesta. Según los Mossos, hacia las 21.00 horas del lunes recibieron un aviso informando de que, como consecuencia de una pelea, había un herido en un local de la población. Rápidamente, los agentes se desplazaron al lugar y comprobaron que había un hombre que presentaba una herida de arma blanca, pero el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) no pudo hacer nada por salvarle la vida.

A partir de ese momento la tensión se disparó en las calles del barrio, donde desde hace meses existe un conflicto cuyo epicentro son las ocupaciones ilegales que los miembros de una familia realizan en viviendas vacías. Fuentes de la asociación de vecinos de la zona advirtieron también a mediados del pasado octubre que algunos de los ocupantes ilegales también se dedican al trapicheo de drogas. Desde verano pasado se han realizado varias movilizaciones, todas ellas los lunes por la noche.

La de esta semana era la quinta concentración.Tras conocerse el homicidio, la tensión se ha establecido en el barrio. Para evitar enfrentamientos como respuesta a la muerte, los Mossos d’Esquadra desplazaron ayer a decenas de agentes antidisturbios. Los uniformados tomaron literalmente el barrio y precintaro n la zona donde todavía se encontraba el cadáver. También establecieron controles para regular el acceso a los residentes en las viviendas de las calles Berenguer y Josep Tarradellas. Una de las líneas policiales evitó, también, que vecinos que habían participado en la protesta accedieran al lugar donde ha fallecido uno de ellos.

Hasta el lugar llegaron también familiares de la víctima, los cuales fueron informados en la misma calle del homicidio. Los Mossos ofrecieron a una pareja de mediana edad que ha llegado hasta la calle Berenguer apoyo psicológico poco después de explicarles lo sucedido. Ambos fueron trasladados hasta la vivienda de la víctima.