La plantilla del Hospital de La Ribera inquiere a Montón por su futuro

En 2018 finaliza el concierto entre la Generalitat y el Hospital de La Ribera de Alzira. A estas alturas, la plantilla del centro, formada por 1.800 personas, entre jefes de servicio y responsables asistenciales y no asistenciales, desconoce qué pasará con ellos cuando el contrato acabe y el hospital se introduzca en el sistema público.

Por ello, el personal registró ayer un manifiesto en la Conselleria en el que le plantean a la responsable del Departamento, Carmen Montón, cuestiones como si el centro se va a convertir en una empresa pública o fundación; si los trabajadores pasarán a ser fijos o interinos o si las plazas saldrán a concurso público; o si van a continuar trabajando todos los empleados, entre otras cuestiones.

Como se puede apreciar, se trata de preguntas fundamentales para el futuro laboral de estas personas que, en algunos casos, llevan más de quince años trabajando en el Hospital.

En el manifiesto se pregunta también si se les mantendrán las condiciones laborales, si seguirán los mismos cargos directivos y por qué se desconocen los resultados de las Auditorías internas sobre el funcionamiento del centro.

Asimismo, se le inquiere a la consellera si conoce los datos asistenciales y de calidad del centro hospitalario y qué opinión le merece su trabajo en comparación con el resto de Departamentos de salud de la Comunitat.

En el citado escrito, los firmantes expresan su «malestar, inquietud e incertidumbre» y aseguran que «no han sido informados» de cómo va realizarse el proceso de reversión y las consecuencias para los ciudadanos de la comarca de La Ribera.

Precisamente la pasada semana la Conselleria de Justicia descartó, tras reunirse con la Mesa de la Función Pública, realizar un proceso de integración de este tipo de trabajadores en el sistema público sin realizar una oposición, un problema parecido al que se plantea en el caso de reapertura de la RTVV.

Pero lo cierto es que, más allá de las informaciones que se han ido publicando, la Conselleria de Sanidad no ha mantenido un encuentro con los empleados de este hospital que se verán afectados si se realizara el paso a la red pública. Lo mismo podría suceder si se compra el Hospital de Dénia.