Economía

Piqué fija en 2016 ó 2017 el «equilibrio sano» de la economía española

Considera que será una década «perdida» y «pésima» en crecimiento

El presidente del Círculo de Economía y de Vueling, Josep Piqué, dio ayer una lección magistral en Forinvest sobre las causas y el futuro de la crisis
El presidente del Círculo de Economía y de Vueling, Josep Piqué, dio ayer una lección magistral en Forinvest sobre las causas y el futuro de la crisislarazon

«Estamos purgando los excesos cometidos durante años». De esta forma tan gráfica explicó ayer el presidente del Círculo de Economía y de Vueling, Josep Piqué, que a esta crisis todavía le quedan tres o cuatro años. Situó en «2016 o 2017» la llegada de España a una «deuda sana», después de años de sobreendeudamiento.

Piqué ofreció una lección magistral sobre las causas y consecuencias de la crisis durante la clausura de Forinvest, el certamen de productos financieros que se ha presentado durante estos días en Feria Valencia.

España, dijo, es el paradigma de la naturaleza de esta crisis, ya que durante muchos años ha estado endeudándose más de lo que podía producir, y ahora llega la hora de pagar los errores.

En cuanto a la creación de empleo, indicó que esta se iniciará «bien entrado en 2014 o en 2015». Las soluciones que se están aplicando hasta ahora, señaló, no son suficientes. Destacó que la reforma laboral, evidentemente, no ha servido para crear empleo, aunque sí ha conseguido una mayor flexibilización del mercado del trabajo.

Hasta ahora, indicó, todas las medidas que se han adoptado en materia económica «han descansado en subidas de impuestos a la clase media y recortes en ámbitos que limitan la capacidad de crecimiento del futuro». En este sentido, señaló que lo realmente necesario es una «simplificación del sistema de las Administraciones Públicas que fuimos creando pero que es excesivamente caro».

Además, y echando un capote al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, allí presente, reclamó la necesidad de una reforma del sistema de financiación autonómica, puesto que las Comunidades asumen las competencias más costosas y por lo tanto necesitan más recursos. «Es un debate de sentido común».

No sólo le preocupa la situación económica. Piqué indicó que «la corrupción mina la moral colectiva» y mostró su temor de que se produzca una «italianización» de la vida política española. «Problemas tan serios requieren esquemas de gobernación sólidos».

Tras un repaso tan intenso de la situación económica y política, el presidente de la Generalitat valenciana, Alberto Fabra, aseguró que el Consell seguirá ajustando y reduciendo la Administración creando un «nuevo instrumento al servicio de los ciudadanos, más acorde al siglo XXI».

Además, destacó algunos indicadores que, desde su punto de vista, suponen un «balón de oxígeno» para la Comunitat, como el aumento en un once por ciento en el mes de enero del número de empresas creadas.