Comunitat Valenciana
Reabren al baño cuatro playas de Benicàssim cerradas por una bacteria
El Ayuntamiento presenta una queja formal contra la Generalitat por haber avisado de la contaminación con un «e-mail» fuera del horario de oficina
Las cuatro playas de Benicàssim que permanecían cerradas al baño desde el pasado domingo -las de Almadraba, Torre Sant Vicent, Terrers y Heliópolis- por la presencia de la bacteria E.coli fueron reabiertas ayer ya tras recibir el resultado del análisis del agua. Según informaron fuentes municipales a Efe, las playas que permanecían con bandera roja ondeando desde el mediodía del domingo volvieron a izar la bandera verde a las 14 horas de ayer.
Las aguas de las tormentas de la semana pasada que llegaron hasta el mar son la posible causa de la contaminación puntual de estas playas de Benicàssim, además de las de Oropesa y Cabanes, que también se cerraron al baño pero que ayer amanecieron ya con bandera verde.
La alcaldesa de Benicàssim, Susana Marqués (PP), lamentó la «dejadez y desidia de la Conselleria de Medio Ambiente con la seguridad sanitaria de los vecinos», ya que la orden se envió el viernes, pero no se hizo efectiva hasta el domingo, porque se tuvo conocimiento del informe a última hora del sábado.
Marqués afirmó que tras detectarse la contaminación, «la decisión fue ordenar el izado de la bandera roja en las playas afectadas, ubicar hojas informativas de la situación en los paneles públicos de información de las playas y trasladar estas medidas a la Dirección General del Agua de la Conselleria».
Explicó que el informe de la Conselleria «se firmó el viernes a las 14.50 horas, y se envió por correo a un funcionario a las 15.17 horas, fuera del horario de oficina, sin garantía de recepción y sin contrastar que la información hubiera llegado».
A su juicio, «si era una información sanitaria de urgencia, debería haberse comunicado, al menos, por teléfono de manera inmediata, y siempre que fuese en horario fuera de trabajo, se debería haber comunicado de emergencia a la Policía».
Por este motivo, la alcaldesa de Benicàssim exigirá responsabilidades a la Conselleria y presentará una queja formal por las consecuencias que podrían haberse producido. También anunció que, a partir de ahora, el Ayuntamiento que preside hará «de manera autónoma y privativa análisis semanales para garantizar que el agua de las playas de Benicàssim cumple siempre la normativa sanitaria».
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