Xarxa Llibres cierra el plazo de traspaso de libros sin haberlo llevado a cabo

Los ejemplares continúan en los depósitos de los concertados que han dejado de participar en el programa

Xarxa Llibres continúa demostrando su ineficacia. El plazo para realizar el traspaso de libros de propiedad pública finalizó ayer y la operación no se ha realizado. Los ejemplares que se encontraban en los colegios concertados que han dejado de participar durante este año, siguen en estos centros, mientras aquellos que tenían que haber recibido este material, todavía carecen de él.

Desde Escuelas Católicas de la Comunidad Valenciana afirman que la situación permanece igual que hace dos semanas y que «hay muchas dudas, pero pocas respuestas». La secretaria de la entidad, Vicenta Rodríguez, explicó ayer que los problemas generados por el programa van en aumento.

Por un lado, la preocupación de los colegios concertados que han dejado de participar sigue en auge. Estos mantienen los ejemplares empleados durante el curso anterior en sus instalaciones y nadie ha ido a recogerlos. Estos centros tampoco han programado el traslado de los libros porque no saben cuál es su lugar de depósito, y desde Conselleria de Educación no les facilitan una solución.

En segundo lugar, todos los colegios poseen los libros de texto de segundo y cuarto de la ESO, los cuales han dejado de ser prácticos con la aplicación de la Lomce, dado que ya no se adaptan al programa educativo. Por tanto, los profesores no podrán impartir sus lecciones a partir de estos manuales y nadie ha especificado cuál será su próximo destino.

Por último, algunas familias se han visto afectadas porque han tenido que comprar libros, ya que sus hijos comenzaban el curso sin todo el material necesario, o el facilitado por el Ayuntamiento estaba en mal estado.

Asimismo, Rodríguez aseguró que desde la entidad están «encantados» con Xarxa Llibres, pero consideran que el proceso ha sido muy precipitado. A pesar de que la idea de la gratuidad de los libros de texto para todos los alumnos de la Comunitat es muy beneficiosa, según la secretaria de Escuelas Católicas, la Generalitat tendría que haber desarrollado la iniciativa progresivamente. Por tanto, antes de poner en marcha la idea en todos los cursos, Educación habría de haber marcado unas pautas más específicas, tanto a familias como a centros de enseñanza, para una mejor organización.

Además, Rodríguez consideró que los plazos han superado las expectativas de la Conselleria y que el plan es «demasiado ambicioso».