Delincuencia

Detenido «el primo del Niño Juan», huido desde 2014

La detención de este «alunicero» fue llevada a cabo por agentes de la Policía Nacional de Móstoles.

Juan C., fugitivo de la justicia, embisitó su vehículo contra el escaparate de un negocio en Móstoles.
Juan C., fugitivo de la justicia, embisitó su vehículo contra el escaparate de un negocio en Móstoles.larazon

La detención de este «alunicero» fue llevada a cabo por agentes de la Policía Nacional de Móstoles.

No hay nada como la recompensa de un trabajo bien hecho. Y es que tras largos meses de intensa investigación y vigilancias, la Policía Nacional pudo arrestar, por fin a Javier C., según anunció ayer la Jefatura Superior.

La Policía Nacional de la localidad de Móstoles consiguió a finales de mayo dar con el conocido «alunicero», que contaba con hasta 60 detenciones anteriores a sus espaldas, de ese Cuerpo y de la Guardia Civil. El primo de «el Niño Juan», era buscado por ocho juzgados diferentes de España, que habían emitido órdenes de búsqueda y captura. Dos de ellas ordenaban el ingreso en prisión del fugitivo. La última fue emitida en el año 2014.

A partir de ese momento Javier C. emprende una estrategia para esfumarse y no dar pista alguna de su paradero. No lo hizo del todo mal. El taller de vehículos que parecía regentar, lo había puesto a nombre de su hermano con el fin de despistar a cualquiera que intentase descubrir su paradero. Pero la Policía seguía muy de cerca las pistas que se le pudiesen escapar al prófugo, sabían que frecuentaba la localidad de Móstoles. Javier C. cuidó mucho sus movimientos, no quería, ni podía hacerse notar. Sabía que, como una espada de Damocles, el peso de la justicia no tardaría en dar con él.

Tras varios meses de investigación, la Policía Nacional consiguió detectar el lugar donde se escondía, un paraje rural alejado del núcleo urbano. Quizá pensó el fugitivo que allí podría esconderse de su ineludible destino.

Pero como para todos los malhechores, llegó el fin. Un día del pasado mayo, Javier C. estampó su coche contra un escaparate en la localidad de Móstoles. Con rapidez, agentes de la Comisaría de Móstoles se apresuraron a detener a dicho «alunicero», desplegando un amplio dispositivo. Negándose a rendirse, el fugado de la justicia trató de abandonar el lugar por todos los medios. A bordo de su vehículo, y con decisión en su cometido, embistió dos vehículos policiales, un coche y una motocicleta para llevar a cabo su huida.

No contento con su actuación, al ser detenido volvió a utilizar la carta de la falsa identidad para para eludir las consecuencias. Conociendo su largo expediente, enseñó a los agentes la documentación de su hermano para intentar escabullirse. Aunque opuso una fuerte resistencia frente a los agentes, finalmente pasó a disposición de la autoridad judicial, quien ordenó el ingreso en prisión del ya ex prófugo.