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El Ayuntamiento de Moraleja de Enmedio hace oídos sordos a las sentencias que anularon un despido de una delegada sindical de CSIF

La alcaldesa recurrió sin éxito hasta el Supremo la readmisión y el pago de los salarios de tramitación a esta trabajador

Valle Luna, alcaldesa de Moraleja de Enmedio (Facebook)
Valle Luna, alcaldesa de Moraleja de Enmedio (Facebook)larazon

El Ayuntamiento de Moraleja de Enmedio, que dirige la alcaldesa Valle Luna (PSOE), se niega a dar cumplimiento íntegro a la sentencia del Juzgado número 2 de Móstoles, posteriormente ratificada por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), que obligaba al consistorio a readmitir a una trabajadora despedida hace dos años y medio de manera improcedente y a pagarle los salarios de tramitación. Esta empleada ha sido finalmente readmitida pero el ayuntamiento se niega a abonarle los salarios de tramitació más los intereses generados desde el despido.

Valle Luna es, además de alcaldesa de Moraleja, vocal de la Federación de Municipios de Madrid (FMM), que en la actualidad negocia las mejoras laborales de los empleados públicos de la Administración Local en la Comunidad de Madrid, así como el respeto a los derechos y garantías sindicales de estos trabajadores, algo que incumple al no acatar por completo una sentencia firme favorable a una empleada de su ayuntamiento, según el sindicato.

Asimismo, esta regidora ha criticado repetidamente la deuda originada en el ayuntamiento por sentencias firmes del gobierno anterior, olvidándose de la que ha originado ella desde que tomo posesión de su cargo en junio de 2015 por sentencias que también son firmes.

La alcaldesa decidió hace ya más de dos años y medio despedir a las dos agentes de Empleo y Desarrollo Local que trabajaban en el municipio de Moraleja de Enmedio. Una de estas trabajadoras, secretaria del Comité de Empresa y delegada de CSIF, recurrió este despido ante la Justicia. La sentencia dictada en primera instancia en noviembre del año 2016 por el Juzgado número 2 de Móstoles declaró dicho despido improcedente, estimando las pretensiones de la trabajadora.

El Ayuntamiento decidió recurrir la sentencia ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, que confirmó la sentencia de instancia. No conforme con la mencionada resolución probó de nuevo suerte ante el Tribunal Supremo, instancia que ni siquiera admitió a trámite el recurso interpuesto, todo ello a costa del erario público y a sabiendas de la escasa o nula posibilidad de que prosperaran los recursos interpuestos.

A juicio de CSIF, con la negativa a ejecutar íntegramente la sentencia favorable a esta trabajadora, el Consistorio está aumentando injustificadamente la deuda de un ayuntamiento ya de por sí muy endeudado, alargando lo máximo posible tanto la reincorporación de la trabajadora, que se hizo efectiva el pasado mes de mayo, como el abono de los salarios de tramitación devengados, según se ordenaba en la sentencia.

Ante el incumplimiento íntegro de la sentencia, la trabajadora ha tenido que solicitar hasta en dos ocasiones la ejecución de la misma. Un no acatamiento que supondrá más dinero para las arcas municipales.