El Plan A doblará los tiempos de desplazamiento de los conductores

Un estudio asegura que perderán 42 jornadas laborales en llegar al trabajo

Apenas habían recibido la aprobación definitiva y las treinta medidas que incluye el Plan A de Calidad del Aire del Ayuntamiento de Madrid ya se toparon ayer con sus primeros detractores. Los conductores, representados por el RACE, aseguraron que su eficacia será «limitada en su propósito de reducir la contaminación». Se basan para hacer esta afirmación en los datos de una encuesta del Observatorio Español de Conductores (el informe DUCIT) que ha entrevistado a 1.800 automovilistas madrileños y en la que el 65% de los encuestados afirma no tener un transporte alternativo al vehículo privado, o tenerlo pero con muchas dificultades. En el mismo estudio los ciudadanos expresan sus dudas sobre el proyecto que, entre otras medidas, limitará el tráfico en el centro de Madrid a partir del segundo semestre de 2018 porque, aseguran, «tardarían el doble de tiempo en llegar a sus puestos de trabajo en caso de que tuvieran que prescindir de sus vehículos». De media, han calculado, el tiempo de más que tardarían en sus desplazamientos al trabajo superaría las 42 jornadas laborales. En la capital un 72% de los conductores se desplaza hasta su empleo en su propio vehículo, un número que asciende al 85% en el caso de los automovilistas de la provincia.

Con estos datos sobre la mesa el RACE hace una llamada a poner el foco en alternativas que mejorarían los niveles de NO2 en la capital como la puesta en marcha de estímulos para el «rejuvenecimiento» del parque automovilístico, el fomento de alternativas híbridas y eléctricas –un 26% de los conductores de Madrid se han planteado adquirir un vehículo eléctrico–, o la estimulación del uso del transporte público a través de una ampliación de las paradas y rutas, un aumento de las frecuencias y la bajada del precio del transporte público de la capital. Los conductores también ponen el acento en los insuficientes aparcamientos disuasorios que hay en los barrios de la periferia para que los conductores dejen sus coches y opten por viajar en metro o autobús.

También Ecologistas en Acción, que aplaudió el Plan A y hace un balance «positivo» del mismo, manifestó que incluye medidas que no comparte como el tratamiento como excepción que este proyecto da a las motos o la creación de una «red de aparcamientos intermodales».

El visto bueno definitivo para el Plan A salió ayer de la Comisión de Calidad del Aire y hoy el proyecto será ya presentado públicamente por la delegada del área, Inés Sabanés, y la propia alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena. El proceso, sin embargo, no ha estado libre de polémicas: «Quiere aprobar el Plan A sin pasar antes por el Pleno», denunció el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, que pedirá un pleno extraordinario en Cibeles para debatir este proyecto para reducir la contaminación. Extraña que el procedimiento se haya llevado a cabo de este modo, «no lo ha sometido a debate entre los ciudadanos», aseguró, viniendo del Gobierno «de la transparencia y la participación».