Fiebre Potter

El furor por el niño mago lleva a prolongar dos meses la exposición del universo J.K. Rowling en Madrid. La muestra se inaugura mañana y ya se han vendido 150.000 entradas

La magia de «Harry Potter: The Exhibition» ya está instalada en Madrid. Los encargados de dar la bienvenida a los millares de fans de la saga de JK Rowling al pabellón número 1 de Ifema, que acoge la exposición desde ayer, fueron James y Oliver Phelps, los actores que interpretan a los gemelos Fred y George Weasley en las adaptaciones cinematográficas de las novelas de la escritora británica.

Solo en preventa, los organizadores aseguran que ya han vendido 150.000 entradas y que prácticamente todos los pases de fin de semana se encuentran agotados, todo un récord entre los países que han acogido hasta el momento esta exposición itinerante que por primera vez se puede ver en español. Tal ha sido el fervor entre el público que ha desbordado las expectativas de los responsables, que reaccionaron rápido. Y es que, finalmente «Harry Potter: The Exhibition» se podrá visitar en la sede de congresos madrileña hasta el próximo 2 de abril –dos meses más de lo previsto, ya que la fecha de clausura establecida antes de verse desbordadas todas las expectativas era el 28 de enero–. Las entradas para estos días adicionales ya se pueden adquirir a través de la página web de la muestra.

Aunque el público general no podrá acceder al recinto hasta mañana, los trabajadores ya vieron ayer una muestra de lo que les espera en estos meses con la presentación a los medios de comunicación, que acudieron en masa al acto inaugural. Un total de nueve escenarios que evocan algunos de los lugares donde Harry, Ron y Hermione viven algunas de sus aventuras forman el Hogwarts a pequeña escala que se ha creado en Madrid. Y es que la visita empieza con una presentación a cargo del mismísimo Sombrero Seleccionador, que además ofrece la oportunidad a algunos de los visitantes de averiguar a qué casa de Hogwarts pertenecen (Gryffindor, Hufflepuff, Ravenclaw y Slytherin). Después, una proyección de algunos de los mejores momentos de las ocho películas hará que más de uno se emocione y llegue a casa con ganas de hacer un maratón.

1.400 metros de magia

En total, la exposición ocupa más de 1.400 metros cuadrados, con los que Ifema se abre por primera vez a grandes eventos diversificando su actividad hacia otros atractivos. Uniformes del malvado séquito de Voldemort, los mortífagos, el cofre donde se guardó el Cáliz del Fuego, pasando por los uniformes de Quidditch de todas las casas del colegio de magia pueden verse por primera vez. Los visitantes también tendrán la oportunidad de fotografiarse dentro de la cabaña de Hagrid, el guardabosques, de sentarse en su gigantesco sillón, y de mirar –si se atreven– a los ojos del Ángel de la Muerte, que retuvo a Harry Potter mientras contemplaba inmóvil cómo Voldemort recuperaba todo su poder. Además, para los admiradores de la saga con menos memoria o más despistados, a lo largo de todo el recorrido se han colocado tarjetas explicativas en las que se detalla en qué momento de la saga aparece cada objeto, algunos de los cuales no son sólo codiciados por los fans, sino también por los propios actores de la saga: «Si pudiera llevarme alguno de los objetos que componen la exposición sin duda me quedaría con mi varita. Siempre pensé que nos dejarían quedárnoslas cuando termináramos de grabar, pero luego nos informaron que pasarían a formar parte de esta exhibición», confesó Oliver Phelps.

Y es que en «Harry Potter: The Exhibition» se muestran las varitas de todos los personajes que han formado parte de la mágica saga y que hasta el momento, y después de su paso por ciudades como Boston, Toronto, Nueva York o Chicago, ya las han disfrutado más cuatro millones de personas. Por su parte, James Phelps sueña con colocar en la entrada de su casa la reproducción a escala real de Dobby, el elfo doméstico que también forma parte del catálogo de figuras de la muestra.

El horario de apertura es de 10 a 20 horas los martes, miércoles, jueves y domingos, y de 10 a 21 horas los viernes y sábados. Las entradas de adultos se pueden conseguir a partir de 16,90 euros, unos pases que son tres euros más baratos para los niños. Los organizadores también han sacado a la venta un pack familiar para cuatro personas por 50 euros.