“Muerte al Estado, viva la anarquía”: anuncian una campaña de “okupación” de viviendas en Madrid

Los grupos anarquistas deciden emprender una campaña de “okupaciones”, después de que uno de ellos fuera desalojado del que habían usurpado ilegalmente en Madrid

“Muerte al Estado, viva la anarquía”. La ocupación ilegal de viviendas es uno de los fenómenos más preocupantes que vive nuestra sociedad, en especial para los propietarios que de la noche a la mañana se ven despojados de sus casas, que tanto les ha costado pagar (o que están pagando mes a mes) sencillamente porque unos individuos han decidido, la cita es textual, que sean “su nuevo hogar”.

Con ser alarmante el asunto, ahora resulta que los grupos anarquistas deciden emprender una campaña de “okupaciones”, después de que uno de ellos fuera desalojado del que habían usurpado ilegalmente en Madrid. No se trata de jóvenes sin posibilidades económicas, sino anarquistas organizados.

“Tras la caída, toca levantarse. No es la primera ni será la última vez que nos golpeen, pero nunca podrán pararnos. Continuamos con el proyecto de la Gatonera (así se llama uno de estos grupos) y todo lo que eso conlleva: una actitud, unos valores innegociables y una manera de enfrentarnos a esta realidad podrida.”, afirman.

“No hay lugar ni para la negociación, ni para el pacto, ni para la rendición. Estos principios han movido la Gatonera durante sus más de 10 años y por eso, en nuestro último espacio a pesar del acoso constante, rechazamos el dinero que ofrecían, nos mantuvimos firmes tras sus amenazas de enviarnos a Desokupa, y solo con la ayuda de la policía, pudieron impedirnos recuperar el edificio”. Es decir, que no aceptaron ni siquiera una solución económica, cuya virtualidad está por ver porque no parece que el delito se combata mediante el pago de dinero.

“Hay que aprender y prepararse para luchar contra sus nuevas herramientas. Esto no es tarea de un solo centro social okupado anaarquista, colectivo o individualidades, creemos necesario construir puentes entre quienes compartimos principios y modos de lucha (...) seguir siendo un proyecto anarquista en el que se sientan bien recibidos y acogidos todos aquellos que compartan sus valores”

Terminan indicando una dirección en Madrid en la que han “okupado” otro edificio.