Manifestación

La concejala de Tetuán se salta el protocolo de la Policía Municipal

Los agentes se negaron a cumplir una indicación verbal

Los okupas de ultraderecha del Hogar Social Madrid se manifestaron ayer por la calle Bravo Murillo
Los okupas de ultraderecha del Hogar Social Madrid se manifestaron ayer por la calle Bravo Murillolarazon

El colectivo profesional de policías municipales de Madrid denunció ayer que la concejala de Tetuán, Montserrat Galcerán, se saltó todos los protocolos de actuación con la Policía para proteger el Centro Social Okupado La Enredadera. Según explicó el portavoz del colectivo, Julián Leal, ante la convocatoria de dos manifestaciones de signo contrario en el distrito –la de los okupas de ultraderecha del Hogar Social Madrid y la convocada por la Coordinadora Antifascista de Madrid–, un asesor de la concejala pidió que se estableciera una patrulla de la Policía Municipal en las cercanías de La Enredadera para proteger a los okupas de izquierda radical de los manifestantes de derechas, cuya protesta terminaba muy cerca del edificio okupado.

Sin embargo, esta orden se realizó únicamente de forma verbal cuando los protocolos policiales obligan a hacer estas indicaciones por escrito. «Al no tener la orden por los conductos reglamentarios, los agentes se negaron a acatarla y no se desplazó ninguna patrulla. Además, no es la concejala, sino el Área de Seguridad quien tiene potestad para dirigir el operativo», señaló Leal, que destacó el interés del equipo de Ahora Madrid en defender a los okupas de izquierdas.

Fuentes del Ayuntamiento explicaron a su vez que desde la Junta no se había dado ninguna orden sino que se había «mostrado preocupación ante la existencia de una mezquita y un centro social –confirmaron que se referían a La Enredadera–al final del recorrido planificado de la manifestación» de los okupas de ultraderecha. Indicación que, según señalaron, forma parte del «marco de la normalidad de la comunicación entre una junta y la Policía».

Finalmente, y aunque la tarde de ayer se preveía movida en Tetuán por la confluencia de las dos manifestaciones en el distrito, no se produjo el temido encuentro entre antifascistas y okupas de ultraderecha. La Coordinadora Antifascista de Madrid decidió desconvocar su protesta después de que la Delegación del Gobierno rechazase la petición de urgencia alegando que se había presentado fuera del plazo mínimo de 24 horas para poder estudiar si había lugar a la urgencia.

Desde la confluencia de Ríos Rosas y la calle Santa Engracia 300 manifestantes en apoyo del grupo okupa de ultraderecha Hogar Social Madrid marcharon Bravo Murillo arriba en defensa de las ayudas sociales para los españoles, escoltados por siete furgonas de la Policía Nacional y un helicóptero, sin que se registraran incidentes. La Coordinadora Antifascista había convocado a su vez una protesta «para mostrar la repulsa de las vecinas y los vecinos del barrio de Tetuán a las ideas y actitudes racistas y xenófobas que conducen a la segregación y alteran la convivencia pacífica».

La acampada incumplía las ordenanzas

El portavoz del colectivo profesional de Policía Municipal de Madrid, Julián Leal, confirmó ayer que era responsabilidad del Ayuntamiento y no de la Delegación del Gobierno el desalojo de las acampadas a las puertas de Cibeles. «Igual que los manteros, incumplían las ordenanzas municipales de ocupación de la vía pública, por lo que debía desalojarlos la Policía Municipal», aseguró el portavoz del colectivo de policías.