«Oye, chaval, ¿a quién estás buscando? ¿A tu madre? Sube que te llevo. ¡Vamos!»

La Guardia Civil de Las Rozas sigue investigando un presunto intento de secuestro a un adolescente de 14 años a las puertas del colegio Logos, situado en la calle Sacre, 2 de la localidad, dentro de la urbanización Molino de la Hoz.

La Guardia Civil de Las Rozas sigue investigando un presunto intento de secuestro a un adolescente de 14 años a las puertas del colegio Logos, situado en la calle Sacre, 2 de la localidad, dentro de la urbanización Molino de la Hoz. «Todas las hipótesis posibles» siguen abiertas, según informan fuentes del Instituto Armado. Al parecer, según explicó el menor a su progenitora y a los agentes que le exploraron, una vez dentro del recinto, se percató de que le faltaba el libro de francés en el coche de su madre, que le había acercado hasta el centro educativo y se fue una vez el muchacho había pasado la verja verde. El joven salió rápido para tratar de localizar a su madre antes de que desapareciera con el vehículo y fue en las inmediaciones donde estaba el presunto captor. Según fuentes cercanas a la investigación, estaba apoyado en la parte trasera de una furgoneta roja, de mediano tamaño y sin ninguna rotulación. La matrícula terminaría en 8K. El individuo, al ver al menor tratando de divisar algo, se acercó a él y mantuvieron un breve diálogo: «Chaval, ¿a quién estás buscando?». «A mi madre», le contestó el joven. «Sube que te llevo a buscarla», le dijo el hombre. «No, no voy a subir», repitió el menor. «Que subas, ¡vamos!, que te llevo», contestó el presunto captor al tiempo que le agarró del brazo. El joven logró dar un tirón para soltarse y se fue corriendo hacia dentro del centro educativo. Desde el perfil de Facebook de la urbanización Molino de la Hoz solicitaron, poco después, la colaboración de los vecinos que habrían pedido, a su vez, los investigadores. Preguntaban si alguien había recibido un paquete o carta a través de una empresa de mensajería entre las 8:00 y las 10:00 horas del 8 de marzo. Y es que se da la circunstancia de que la urbanización, donde está el colegio, es privada y cuenta con barrera y garita de seguridad, por lo que el acceso está controlado. Ayer, los investigadores continuaban con las pesquisas y tomaron declaración a varias personas.