Murcia aprueba la financiación del tramo final del soterramiento

La cuantificación económica correspondiente al Ayuntamiento es de 41,44 millones de euros este ejercicio

El Pleno del Ayuntamiento de Murcia dio ayer luz verde a la financiación de la totalidad del proyecto de soterramiento con fondos propios de las tres administraciones -estatal, regional y local-, así como la adjudicación de la segunda y última fase, desde El Carmen hasta su salida en Nonduermas. «Mientras, continúa su ejecución la primera fase, entre el puente de Tiñosa y la entrada en la estación. De esta forma, se garantizan los ocho kilómetros de vías soterradas en la ciudad».

Así lo detalló el alcalde de Murcia, José Ballesta, quien recordó que hace cuatro años, cuando se construyó la actual Corporación, «no existía ni un solo metro de soterramiento, ni estaba licitado, ni mucho menos en obras. En este momento, la mitad está en ejecución y el resto se iniciará de manera inmediata».

Tal y como establece la adenda aprobada ayer, los 617 millones que implica el proyecto permitirá solventar, según Ballesta, «una reivindicación histórica de hace decenas de años, para eliminar esa barrera artificial que eran las vías a su paso por la ciudad».

Aportación municipal

El alcalde detalló que tras someterse a votación en el Consistorio y recibir el apoyo unánime de todos los grupos parlamentarios, salvo la abstención de Ahora Murcia, la cuantificación económica correspondiente al Ayuntamiento es de 41,44 millones de euros este ejercicio. «El resto de aportaciones se prolongarán hasta 2028».

El visto bueno de esta partida económica responde al informe de la Intervención Municipal. Según se determina, la situación financiera de la Administración Local «permite afrontar estos compromisos económicos», dado que no se superan los límites de endeudamiento permitidos.

Es por ello que el propio Ballesta agradeció a todas las administraciones las aportaciones y los grupos de trabajo puestos en marcha en los últimos cuatro años. «Hemos dedicado esfuerzo, perseverancia y trabajo».