Gastronomía

Los 150 años de Fundador, el primer brandy español

El destilado se hace su hueco en las barras como trago largo y en cóctel

Ángel Piña, director global comercial y de marketing del Grupo Emperador, © Alberto R. Roldán / Diario La Razón. 08 07 2024
Ángel Piña, director global comercial y de marketing del Grupo Emperador, © Alberto R. Roldán / Diario La RazóAlberto R. RoldánFotógrafos

Fundador está de aniversario, ya que se encuentra en plena celebración de los 150 años del primer brandy español, mientras que el origen de la marca data de1730 con el nacimiento de Bodegas Fundador, la más antigua del Marco de Jerez, fundada por Pedro Domecq, creador de la citada bebida en 1874. Acoge las marcas Fundador, Garvey, Terry y Harveys, «el jerez más vendido en el mundo. A veces, uno no es profeta en su tierra y nuestros mercados más importantes son Reino Unido, Canadá e Irlanda», explica Ángel Piña.

Durante nuestra conversación, nos centramos en el brandy Fundador, bebida que se ha sabido posicionar, a pesar de las tendencias y modas que dominan el sector de los destilados.

En definitiva, brandy Fundador ha regresado a las barras como ingrediente principal de un trago largo y de esos cócteles que gustan incluso a unos jóvenes hasta ahora desconocedores de la bebida, que ha sabido renovarse: «El objetivo ha sido contemporizar y la premiumización del producto respetando una tradición y una forma de hacer. Estamos embarcados en este proceso para continuar otros 150 años más», dice el director comercial y de marketing de la marca, quien asegura que la tendencia evoluciona hacia unas bebidas naturales y sin azúcares añadidos que nos atraen: «Nosotros destilamos vinos sin sulfitos, en concreto, la gama de Fundador Supremo. Son bebidas redondas, fáciles de beber y combinables con cualquier refresco», afirma.

Nos pone como ejemplo, los productos de la marca Sherry Cask, tanto Solera como doble y triple madera, que entusiasman combinados con Coca Cola, Ginger Beer y con tónica de pomelo. Porque, insiste Piña, para llevar a cabo esta evolución, que consiste en la modernización de la bebida, están apostando por el momento de consumo en el que el trago largo toma protagonismo: «El brandy está diseñado para que junto con el refresco formen una comunión, no para que cada uno vaya por su lado. La idea es que armonice bien con la mayoría de los refrescos y que no sea una casualidad, porque se ha tenido en cuenta en la elaboración».

Asimismo, dentro de la modernización del destilado, la marca se ha centrado en la tan necesaria premiumización. En ella, juega un papel importante los estuches atractivos que lo contienen. También, destaca Piña el haber puesto el apellido Sherry Cask a una línea de productos elaborados en barricas que, previamente, contuvieron vino de Jerez, «que extraemos y en ellas envejecemos el brandy».

Relata que fueron los escoceses, los mejores productores de Single Malt, quienes pusieron de moda este proceso de elaboración, porque los whiskies escoceses, de una forma o de otra, han permanecido en barricas que, previamente, contuvieron vinos de jerez: «Así que fueron ellos quienes pusieron de moda envejecer los espirituosos en barricas de jerez. Los Sherry Cask nacen en Jerez y como nosotros producimos el Jerez que más se vende en el mundo, que es Harveys, tenemos el privilegio de poder elegir estas barricas». Piña reivindica ponerlos en valor al ser «algo intrínseco a nosotros, porque todas estas barricas están envejecidas en Jerez».

Precursor de la coctelería

Por último, el tercer pilar que sostiene la presencia del brandy es la internacionalización, ya que es lo que hace posible seguir invirtiendo en el patrimonio. Porque cuando Bodegas Fundador fue adquirida por Emperador Distillers, parte del holding filipino de la familia Tan, «el destilado se vendía en 17 mercados. Hoy, está presente en 60».

En definitiva, según palabras de Piña, la marca se está reinventando a la vez que reivindica que estos 150 años de buen hacer, con una historia y un legado detrás, han de ser el trampolín para seguir avanzando: «Es una manera de unir pasado y futuro». Porque, si antaño el brandy era una bebida que se consumía más en los hogares, ahora ha decidido tomar las barras en forma de trago largo o de cócteles.

¿Sabían que el brandy fue el precursor de la coctelería? ¿Y que el cóctel más clásico con brandy podría ser un negroni? En el Mint Julep, podemos sustituir el bourbon con brandy y desvela Piña que el margarita con brandy lo denominan «La Fundadora»: «Muchos cócteles, que están en nuestro ideario, permiten esa versatilidad», asegura.

De hecho, en los conciertos de Los Tigres del Norte, brandy Fundador fue la bebida oficial y en el recinto se sirvieron margaritas con éste, mientras que en la pasada edición de los Latin Grammy, celebrada en Sevilla, se vendieron más de siete mil copas de ginger beer con Fundador doble madera: «Fomentamos la prueba de producto», culmina. ¿Cómo ofrecerlo en una noche de verano? Preguntamos: «Aconsejo una copa de Fundador doble madera con tónica de pomelo y una rodaja de la misma fruta o con ginger beer y una rodaja de lima. Ambos tragos largos son muy refrescantes».