Policía

La «Policía de barrio» vuelve a las calles por Navidad

Las «oficinas móviles» estarán presentes en los 21 distritos. Policías de paisano acudirán a sitios concurridos como la red de Metro y superficies comerciales para «cazar» in situ a los carteristas

Durante estos días festivos, el centro es un hervidero de madrileños de compras y visitantes que acuden a la ciudad para disfrutar de su iluminación y espectáculos
Durante estos días festivos, el centro es un hervidero de madrileños de compras y visitantes que acuden a la ciudad para disfrutar de su iluminación y espectáculosGonzalo PérezGonzalo Pérez

Son las 21:00 horas de ayer. Efectivos de la Policía Municipal se desplazan al Wanda Metropolitano, donde el Atlético de Madrid se enfrenta a Osasuna. Se trata del operativo habitual siempre que alguno de los equipos de la capital juega partido en casa. La presencia de esos agentes en el distrito de San Blas-Canillejas podría significar que otras zonas de la ciudad quedaran más desguarnecidas. Pero no será así durante los próximos fines de semana. El motivo, la «campaña de Navidad» de la Policía Municipal, puesta en marcha desde finales de noviembre.

Este servicio del Área de Seguridad y Emergencias, con pocos años de historia a sus espaldas, contará esta temporada con un total 2.174 agentes, que desempeñarán su labor hasta las 23:59 horas del próximo 6 de enero. Tal y como adelantó durante la presentación del dispositivo de Navidad la delegada del área, Inmaculada Sanz, éste nace para atender aquellas zonas donde la afluencia de personas es especialmente elevada. No en vano, hablamos de un trabajo que los propios agentes valoran como de «proximidad» tanto con los ciudadanos como especialmente con los comerciantes. Algo así como la «Policía de barrio» de toda la vida. El objetivo, que ambos colectivos puedan disfrutar de las fiestas en las calles con plenas garantías.

Así, situaciones como la del Wanda no impedirán el refuerzo de otros distritos. El servicio de Navidad se intensificará durante los fines de semana. Al ser voluntario, suele ser solicitado por los agentes. Supone horas extra y, además, pueden desempeñar su labor en aquellos distritos donde ejercen habitualmente su trabajo para facilitar su implicación en el proyecto. Cuentan con dos turnos, de mañana o de tarde, y, por lo general, el dispositivo lo conforman hasta cuatro personas.

Una de las principales labores de los agentes que trabajan en Centro es ayudar a los turistas
Una de las principales labores de los agentes que trabajan en Centro es ayudar a los turistaslarazon

Cada una de las unidades cuenta con una «oficina móvil», una furgoneta municipal con equipación informática en la que recopilan todas las incidencias con las que se enfrentan con vistas a la realización de estadísticas y de conocer cuáles son las principales preocupaciones de madrileños y de visitantes.

¿Sus puntos? Es cierto que son especialmente visibles las oficinas móviles en distintas zonas de Centro: Puerta del Sol, Preciados, Tirso de Molina, Atocha, Callao Plaza de Celenque... Sin embargo, cubren los 21 distritos de la capital, ya que, durante estas fiestas, la actividad comercial se extiende por todos ellos.

Su trabajo es estar a pie de las necesidades de la calle. Muchos ciudadanos, sobre todo turistas, se dirigen a estas oficinas en busca de una dirección o para que les orienten sobre la mejor forma de transporte para acercarse al centro. Y, si bien esta es una de sus ocupaciones, hay otras menos sencillas de resolver. Es el caso de los delitos menores como hurtos y robos.

A por los carteristas del metro

Una de las funciones de la Policía Municipal durante estas fechas es no solo tomar nota de las denuncias que se produzcan en este sentido, sino impedir, en la medida de lo posible, que los delitos se lleven a cabo. Los agentes están tomando contacto con los comerciantes, tanto en locales pequeños (perfumerías, joyerías, etc) como en grandes superficies, para comprobar que todo está en orden. Afortunadamente, no han llegado grandes incidencias. De momento, los dueños están contentos. Perciben que el comercio se está reactivando. «Esperamos hacer nuestro agosto en Navidad», afirman.

Ahora bien, muchas de las denuncias que reciben los municipales son por parte de viandantes que sufren robos de carteras y bolsos. Tampoco son excepcionales aquellas denuncias que hacen referencia a robos cometidos dentro de vehículos. Especialmente en el distrito de Centro, donde la confluencia de público es enorme. Tanto, que el Ayuntamiento no descarta, si fuera necesario, activar paneles informativos para regular el sentido único peatonal en algunas calles, como Preciados y Carmen. Por ello, durante estos días, policías de paisano trabajarán en zonas como la red de Metro, con el objetivo de «cazar» in situ a los carteristas.

Del mismo modo, estarán presentes, de incógnito, en los grandes centros comerciales. Un punto este último en el que contarán con la colaboración de los vigilantes privados. No en vano, en muchos casos, la propia seguridad de los almacenes conoce perfectamente quiénes son las personas que acuden a los mismos con el objetivo de desvalijar a los clientes. Muchos de ellos repiten y les tienen tomado el pulso.

También se da el caso contrario: el de consumidores que se consideran «robados» en un comercio. Se trata, en este caso, de quejas relativas a los precios y a los presuntos «engaños» en los importes a los que los clientes se ven sometidos. Así, constituyen cuestiones que los agentes municipales tampoco pasarán por alto y también registrarán.

Por último, no descuidarán las labores habituales que los agentes desempeñan a lo largo de los otros once meses del año: controles de alcoholemia y drogas, así como de velocidad; la venta ambulante ilegal, el consumo de alcohol en la vía pública y la contaminación acústica; y la vigilancia en la venta de bebidas alcohólicas a menores, así como el cumplimiento de aforo y horas de cierre en los locales, según está regulado en la Ley de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas. Este último punto, por ser las fechas que son, preocupa especialmente a los vecinos.

Una Gran Vía sin vehículos pesados

En principio, la Gran Vía no sufrirá restricciones extra de la circulación como sí ocurrió el año pasado. De hecho, el plan del Ayuntamiento es que se continúe como hasta ahora, con la aplicación de Madrid Central: los vehículos con etiqueta podrán pasar siempre que aparquen en un párking, mientras que aquellos con etiqueta ECO y Cero podrán circular con total libertad. Pero hasta el próximo 7 de enero no podrán entrar los vehículos de más de 3.500 kilos. Solo quedan exentos los autobuses de la EMT, los de transporte turístico o el servicio de transporte urbano de viajeros para contemplar la iluminación madrileña.