Monasterio tiende la mano a Ayuso: “La apoyamos, juntos podemos cambiar la vida de los madrileños”

“Ni Madrid es el infierno que dice la izquierda, pero tampoco el suyo es un gobierno sin mácula”, dijo Rocío Monasterio sobre la gestión de Díaz Ayuso, dando esa visión a medio camino entre unos y otros. Pero desde el primer momento tendió la mano a la presidenta regional para acabar este curso político con marcado carácter electoral. “La apoyamos, juntos podemos cambiar la vida de los españoles”, dijo en presencia de Santiago Abascal, que escuchaba la intervención de Monasterio desde la tribuna de invitados. Por que la prioridad para Vox es “echarlos (a la izquierda) cuanto antes”.

Aunque también tuvo algunos reproches para la presidenta regional al sembrar la duda sobre si realmente seguía estando Madrid en el centro de sus prioridades. “Usted amaga, pero luego no pega; dice, pero luego no hace”, la reprochó. Lo mismo que lamentó la postura de Ayuso sobre el aborto, que haya “tragado” con los libros que impone la nueva ley de Educación, que se decreten tres días de luto por la muerte de Isabel II y la exigió su opinión sobre el “Madrid central” de Almeida.

Monasterio volvió a sus reivindicaciones históricas: la reducción del gasto superfluo, la bajada radical de impuestos y pidió un mayor esfuerzo con los autónomos más allá de la cuota cero para los que se dan de alta por primera vez con un plan específico

En materia fiscal visualizó a Ayuso en la senda, aunque refirió que “deflactar " no es suficiente. “Tiene que devolver lo que se ha cobrado ya y pidió una nueva bajada de medio punto del IRPF.

En resumen: “Tienen buenos deseos, pero necesitamos que mejoren su capacidad de gestión. Hay que porteger la propiedad privada y dar seguridad la okupación”, señaló.