Decoración

«Azul glaciar» y mucha luz: el éxito de las navidades en Madrid

Juanjo González, decorador con más de 20 años de experiencia, habla con LA RAZÓN sobre las tendencias y tradiciones en decoración para estas fiestas

Juanjo González de «Flores en el Ático» durante uno de sus montajes en el edificio que la aseguradora Santa Lucia tiene en Plaza de España
Juanjo González de «Flores en el Ático» durante uno de sus montajes en el edificio que la aseguradora Santa Lucia tiene en Plaza de EspañaAlberto R. RoldánLa Razón

A menos de un mes para la celebración de una de las festividades más importantes del Cristianismo, las calles de la ciudad ya se han llenado de luces, los establecimientos lucen la decoración tradicional de estas fechas y muchos madrileños ya han decorado sus hogares o esperan hacerlo en los próximos días. Y aunque son bastantes personas las que tienen la percepción de que cada año se comienza antes a celebrar la Navidad, lo cierto es que no es así. Como cada año, el pasado 24 de noviembre tuvo lugar el encendido de luces oficial, al que acudieron miles de personas y que ya se ha convertido en toda una tradición. Un día después abrieron sus puertas las coloridas casetas del ya famoso mercado navideño de la Plaza Mayor y ya no es posible comprar lotería en la administración de Doña Manolita sin esperar cola. Signos todos de que la Navidad ya ha llegado a Madrid.

Lejos de tanta tradición, desde el pasado año, la renovada Plaza de España luce por estas fechas como si del Rockefeller Center de Nueva York se tratara con un pino de 18 metros y una pista de patinaje sobre hielo. Allí mismo, encontramos a Juanjo González Gamallo, un madrileño con más de veinte años de experiencia como decorador, trabajando en el hall del edificio que una conocida aseguradora tiene en este espacio. Están siendo días de mucho trabajo para este sector, dando vida a proyectos que presentaron hace meses y que llevan un importante trabajo creativo detrás y que ven la luz estos días con largas jornadas que pueden alcanzar las doce horas. «Estas semanas son frenéticas, solemos hacer como 50 proyectos al año, pero son bestiales. Todo lo hago así, no escatimo en nada. No miro el presupuesto porque disfruto de mi trabajo», asegura a LA RAZÓN.

En algo más de diez horas y después de tres propuestas presentadas en septiembre, todo aquel que cruce las puertas de este edificio encontrará un nacimiento rodeado por un bosque de árboles de casi cinco metros de altura, decorados en tonos azul glaciar, muy en tendencia este año. «Los escaparates los hemos decorado con vinilos recortados a medida que simulan un pueblo londinense y que completaremos con dos farolas antiguas en la entrada, para simular que estamos en una calle de Londres nevada», apunta.

Este año el oro rosa también es tendencia, pero González no lo ha escogido para sus proyectos. «Me considero muy tradicional, soy de los que opina que la Navidad tiene que ser roja», confiesa. También que la Navidad está por encima de la imagen corporativa a pesar de que trabaja para grandes empresas. Sin ir más lejos, esta misma semana ha llevado a cabo una decoración para IFEMA y para la Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes de la Comunidad de Madrid. «Llevo muchos años en esto y creo que como profesional tengo que decir lo que pienso», asegura.

Y aunque en estos casos su cometido se encuentra en el interior también tiene opinión para la decoración de la ciudad. «No soy nada partidario de los árboles de hierro por lo que la apuesta por un abeto de grandes dimensiones para un lugar como es la Plaza de España me pareció un acierto», sostiene. Quizás por defecto de profesión y aunque considera que la decoración de las calles ha mejorado con los años, dice seguir echando de menos su verdadera esencia y que esta se pierda con luces y motivos que no evocan a la Navidad. «Hay muchos motivos y se pueden hacer cosas verdaderamente espectaculares. No podemos conformarnos con luces que valen para cualquier celebración o árboles iluminados hasta la mitad», apunta.

El principal motivo no cree que sea la falta de presupuesto, es más, el Ayuntamiento de Madrid ha invertido lo mismo este año que el anterior, a pesar del elevado precio al que oscila este año la luz. Por ello, González vería la solución en invertir la misma cantidad de dinero reduciendo los espacios a decorar, pero hacerlo por todo lo alto. Y aunque el trabajo que hace estos días, es su verdadera pasión desde niño sus más de veinte años de experiencia le han demostrado que solo de la Navidad no se vive. Por ello, cuando creó «Flores en el Ático» hace dos décadas, apostó por un servicio completo para cualquier eventualidad relacionada con la decoración: bodas, bautizos, reformas, eventos, cenas… Este mes y una vez acabados los proyectos navideños llegan las cenas de empresa. El siete de enero recogerán todos los montajes y el último fin de semana de enero viajarán a «Christmas World», la Feria Internacional de Decoración Navideña en Frankfurt dónde acuden todos los proveedores de Europa. Allí y en muchos de sus viajes por diferentes ciudades encuentra inspiración, materiales y tendencias de cara a las próximas temporadas. «Viajar me ha demostrado que estamos a años luz en cuanto a la forma de concebir la Navidad que otras ciudades del mundo y creo que podríamos aprender mucho de ellas», confiesa.

Sus tiendas fetiche

Pero como buen experto en la materia, también tiene sus lugares fetiche para adquirir adornos difíciles de encontrar en la ciudad. Primero destaca «Los Peñotes», pues dice es de las pocas tiendas que se parecen a lo que hay por Europa y Estados Unidos. «Me gusta mucho no sólo por la forma en la que lo montan, también por el material que tienen», asegura. Allí apuestan mucho por la flor, con coronas y guirnaldas que estamos poco acostumbradas a ver en España.

Los peñotes apuestan por la flor y cuentan con coronas y guirnaldas que estamos poco comunes en España
Los peñotes apuestan por la flor y cuentan con coronas y guirnaldas que estamos poco comunes en EspañaLos Peñotes

Y después, una pequeña tienda en el 27 de la calle Villanueva, «El Albero», donde durante el año ofrecen alfombras y objetos de decoración que cambian por estas fechas por objetos navideños. «Se nota que los propietarios viajan porque son piezas muy originales y difíciles de ver si no es en ferias especializadas», sostiene. Entre sus indispensables, la luz no puede faltar en ninguna casa pues «un árbol bien iluminado no necesita adornos» y sí se los quieren poner, muchos y bien combinados.

"El Albero" cuenta con piezas adquiridas en tiendas internacionales
"El Albero" cuenta con piezas adquiridas en tiendas internacionalesEl Albero

Sally Hambleton es una floristería de lujo con una amplia selección de productos de decoración. Adentrarse en ella es como hacerlo en un auténtico cuento de Navidad . Adornos para el árbol, mantelería, menaje, velas o coronas son algunos de sus productos estrella para. Además, cuentan con talleres navideños de decoración florar y alquilan su espacio tan especial para cenas privadas.

Además de adornos navideños ofrecen cursos de adornos florales navideños y alquilan el espacio para cenas privadas
Además de adornos navideños ofrecen cursos de adornos florales navideños y alquilan el espacio para cenas privadasSally Hambleton

Abierta desde el año 1984, “Canterano” siempre ha sido un referente en la decoración de la ciudad. Hoy es una de esas direcciones imprescindibles en lo que a decoración del hogar se refiere. Y cuando llega Navidad, todo el local se transforma, trayendo hasta este rinconcito de Chamberí toda la esencia navideña. Además, organiza cursos y talleres de arreglos florales, coronas, centros navideños y hasta árboles de Navidad.