La Razón de...

Ayuso: «Derogaría todas las leyes que se han impuesto por ideología»

Cree que el Gobierno central «no está buscando acabar con la pobreza, sino expulsar a la riqueza»

La Razón de Isabel Díaz Ayuso
La presidenta, durante su intervención en LA RAZÓNAlberto R. RoldánLa Razón

T ras su intervención, Díaz Ayuso contestó a las preguntas de Santiago González, director general de Antena 3 Noticias ; Julián Cabrera, director de Informativos de Onda Cero, Ángela Vera, periodista de La Sexta, y Carmen Morodo, adjunta al director en LA RAZÓN.

Santiago González: Sobre lo sucedido el 2 de Mayo, me gustaría conocer su valoración del roce protocolario.

Más que un roce, ha sido un avasallamiento institucional. Lo lamento profundamente, ya que, en realidad, los protagonistas del 2 de Mayo son todos los héroes a los que homenajeamos cada año. Lamento que el pueblo de Madrid viera esta situación. Algo que se fue calentando durante las semanas anteriores por personas que querían deslucir el evento, que permitieron que se celebrasen manifestaciones en la misma Puerta del Sol, que si no llega a ser porque mi Gobierno se puso en contacto con la Delegación que lo permitía, habríamos tenido incluso manifestaciones el mismo día que se celebraba un concierto de zarzuelas con niños y familias. Era un 2 de Mayo muy especial. Tenemos aquí al presidente del Atlético de Madrid, premiamos a Koke Resurrección; a Juan Carlos Quer, que vino simplemente a recoger una medalla en homenaje y recuerdo a su hija Diana. Era el día de los aceites de Madrid, que han sido reconocidos por primera vez con denominación de origen, de los niños ucranianos, de los enfermos de ELA... Ellos eran los protagonistas. Y el ambiente preparado desde días antes no es de recibo. El señor Bolaños, días antes, ya logró ser el protagonista, y ha demostrado tener muy poco respeto. Llegó exigiendo su silla, la tuvo, durante mi intervención se levantó y se fue... Aprovechó la presencia de los medios para insultar a Núñez Feijóo. Movió la catenaria para meterse en una zona que Protocolo le avisó que no podía estar. Para, posteriormente, tratar a la jefa de Protocolo con el «usted no sabe con quien está hablando». No puede estar en un lugar al que no ha sido invitado. Debían ir los ministros que estaban invitados sin más. Con todo, espero que esto pase ya y los próximos días se sepa quiénes han sido los premiados. Eran 17 premiados excepcionales. No se merecen ni ellos ni los madrileños ese día.

Santiago González: ¿cómo se aplicará la Ley de Vivienda en Madrid?

Cada ayuntamiento decidirá lo que tiene que hacer. Y si hay una zona más tensionada será porque tiene más demanda. Sabrá el propietario a qué precios tiene que poner los alquileres. En Madrid vamos a cumplir la ley, pero en los márgenes que yo tenga no pienso hacerlo. No creo que intervenir la vivienda sea la solución a nada. Cuando en Cataluña se han aplicado recetas similares se ha desplomado la oferta. Se va a potenciar el problema. Y la imagen que damos al mundo: un país que te interviene la empresa, que modifica el Código Penal a favor del amigo, que te ocupa la casa el propio Gobierno...

Julián Cabrera: Ha citado 11 veces al presidente del Gobierno. Al margen, el desencuentro del 2 de mayo tuvo una consecuencia: los candidatos de izquierda quedaron en un segundo plano. ¿Eso significa que su principal adversario será el sanchismo?

Es un adversario de todos, no el mío. Cada uno tiene que hacer su parte. Por la mía, contar la verdad, hacer las cosas bien y contraponer cifras. El presidente ha utilizado la tribuna del Senado para arremeter contra mí, como hace siempre que puede. Lo hace la portavoz del Gobierno en sus ruedas de prensa, que no duda en arremeter contra mí, el líder de la oposición, contra el PP o contra presidentes autonómicos. Teniendo en cuenta que es un Gobierno, que, a la carta, somete a un impuesto a Madrid y Andalucía que no tiene el País Vasco, que nos cerró ilegalmente Madrid en base a unos expertos que no existían, que va a seguir descapitalizando España y que no va a crear ni una sola sede en Madrid... Sí que tenemos un problema. Madrid no tiene una economía subvencionada, somos el motor económico de España y, por tanto, necesita empleos de calidad. Pero todo lo que hace este Gobierno va dirigido a empobrecer a todos, especialmente a la capital. Yo nunca utilizaría un poder autonómico contra un alcalde para hacer lo que ellos hacen. No vamos a pasar ni una. Pero no por altanería, sino porque hay que defender la verdad y hacer frente a tanto deterioro a todos los niveles, no solo institucional, también en la educación, el abandono de empresas y autónomos... Este país no aguanta más. Nosotros tenemos un papel vital en España, porque Madrid es España. Y hablar de Madrid como un país, como pretenden que hagamos, es un gran error, porque lo que ocurre en toda España nos importa a todos los presidentes autonómicos.

Julián Cabrera: Avisaba el martes de la importancia de defender la capitalidad de Madrid y avisaba de los peligros de atacarla. ¿Teme que de aquí a las elecciones de diciembre pueda haber una campaña de descrédito de Madrid respecto al resto de España?

Ya la ha habido, en los peores meses de la pandemia y cada vez que extraen problemas autonómicos, se les da altavoz nacional, y se cuentan medias verdades. Ante eso, solo queda trabajar y defenderse todos los días. La libertad también se defiende ejerciéndola. Seguir trabajando y demostrar al país que se pueden hacer las cosas de otra manera, que no podemos permitirnos cuatro años más así. Desde medios nacionales extraen problemas de Madrid con medias verdades, y no los ponen ante el espejo de otras comunidades. Por ejemplo, la sanidad. Es parte del juego, entiendo.

Ángela Vera: Desde la dirección nacional, el objetivo principal es aumentar el número de votos. Si no se consiguen más gobiernos autonómicos del PP, ¿el liderazgo de Feijóo puede debilitarse?

Primero, eso no va a ocurrir, afortunadamente. Pero también estamos en el «y si». ¿Si no hay mayoría absoluta, será un fracaso? Vamos a pelear y llegar lo más lejos posible. Es evidente que no va a suceder porque todavía los españoles no han tenido la oportunidad de mostrar su hartazgo. Nadie ha pedido que cambien el país por la puerta de atrás, que tantas cosas se normalicen. Cuántos españoles están abandonados a su suerte bien porque están en comunidades secadas por el nacionalismo o en zonas cuyos problemas no existen para la mayoría. El cambio se va a producir. Cuando se ve a la izquierda avisando de manifestaciones, es que se acaba.

Ángela Vera: Se repite desde la dirección nacional que hay que derogar el «sanchismo», pero no llegan a concretar qué leyes derogarían. ¿Qué ley derogaría?

Todas aquellas que se han impuesto de manera ideológica, al margen del criterio científico, jurídico y que minan la convivencia. Empezando por la propia Ley de Memoria Democrática, que es un absurdo hablar de que la memoria sea impuesta por ley. Aquí lo que importa es la verdad y la historia para conocerla y aprender de ella. Y desde luego no escribirla de la mano de Bildu. Lo que se está haciendo desde el 78 es ir desmontando el andamiaje institucional de la mano de los que nunca han querido a España. Y luego derogaría las leyes que están cargadas de sesgo ideológico y no se han negociado con nadie. Sánchez ya puso el listón de la moralidad tan bajo al principio que ya creo que piensa, que una vez todos anestesiados, «puedo hacer lo que quiera». «Una vez que puedo pactar con Bildu, que tengo los socios que tengo, que modifico el Código Penal...» Era cuestión de un escándalo que tapara otro, además de recaudar de manera millonaria para aprovechar en esta última etapa con el «cheque voto».

Carmen Morodo: ¿Cómo ve la situación de pérdida de poder adquisitivo y qué salida tendría que dársele?

La están sufriendo todos los ciudadanos, autónomos y pymes que no aguantan más. Están asfixiados a impuestos y los márgenes son cada vez menores. Lo que se está pretendiendo es hacer, de nuevo, una lucha de clases, como se juega con las identidades para ser el yo contra el otro, el hombre contra mujer, lo público contra lo privado y el rico contra pobre, que es algo que les fascina. El gran triunfo de nuestra democracia es la clase media. No somos un país en el que, por el bolsillo, una persona es de primera o de segunda. Somos un país unido por unos valores y unas preocupaciones. Ellos buscan dividir a través de la justicia social, que llaman, de manera que el culpable de que a alguien le vaya mal en España es que a alguien le vaya bien. Están buscando que los ciudadanos se tomen la justicia por su cuenta. Que «okupen», que maltraten a un empresario... total, la culpa es de él. No hay que intentar que todo el mundo sea pobre, sino que tengan igualdad de oportunidades. Un gobierno que cada vez recauda más, que busca, en lugar de flexibilizar el mercado, recortar ministerios, reformas liberales... buscan culpables. Falcon arriba y abajo y dilapidando dinero público, buscando una pretendida lucha de clases. En lugar de acabar con la pobreza, buscan expulsar a la riqueza, con medidas que solo consiguen que el que tenga capital se vaya, porque están siendo perseguidos.

Carmen Morodo: ¿Seguiría adelante con la proposición de Andalucía en Doñana, pese a que se ha pronunciado en contra de la comunidad científica o Bruselas?

En realidad, lo desconozco, no sé qué es mejor hacer en una situación como esa. Lo que sí sé es que el camino que no se puede tomar es el de no hacer nada, y que cuando un gobierno autonómico actúa, lo normal es ser capaz de sentarse con él y hablar.