Vida Plena

Meditar beneficia al corazón. En la comunidad científica está calando la certidumbre de que el corazón es el centro inteligente de los humanos. ¿Es más importante el corazón que el cerebro? Es posible. Ya se habla de una «inteligencia cardíaca» muy rápida e intuitiva. Una inteligencia práctica que conduce y condiciona nuestras decisiones. Al meditar nos conectamos con la inteligencia del corazón y se abre un canal meditativo que beneficia a nuestra salud. No se trata de psicología, se trata de un proceso físico.

España pierde su dieta. Por mucho que nos arrepintamos hay que reconocer que alimentos fundamentales de la dieta española –por extensión, dieta mediterránease mediterránease están perdiendo. Comemos muy pocas legumbres, que son fuente de proteína y reemplazan a los productos cárnicos. Y consumimos pocas verduras y poca fruta, cuando una dieta rica en ambos productos reduce significativamente el riesgo de infarto de miocardio y cerebral, de diabetes tipo 2 y de cataratas y degeneración macular. Fermentados para vivir más y mejor. Son ricos en prebióticos, probióticos y posbióticos. Son alimentos naturales tratados con técnicas tradicionales de fermentación. Bebidas: kombucha (té fermentado); kéfir de agua (agua azucarada fermentada); kvas (malta, cereales y remolacha); tepache (de maíz y piña); y amazake (arroz). Legumbres: tempeh (habas de soja). Hortalizas: salmueras vegetales; chucrut (col fermentada); y kimchi (vegetales fermentados con especias). Cereales: miso (habas de soja y cereales); y tamari (arroz).

Ya se habla de una «inteligencia cardíaca» muy rápida e intuitiva, que condiciona nuestras decisiones.