La familia eléctrica de Volkswagen crece con el ID.ROOMZZ

Los mercados asiáticos cada vez tienen mayor importancia para los fabricantes europeos de automóviles, que ya preparan versiones específicas y se presentan en los salones más importantes de esta región. En el Salón del Automóvil de Shanghái se ha podido ver el prototipo ID.ROOMZZ, un nuevo miembro de la familia eléctrica del fabricante alemán Volkswagen que avanza las líneas de un SUV de serie que se producirá a partir de 2021 para el mercado chino con una longitud cercana a los cinco metros, tres filas de asientos y tecnología que permite circular de forma autónoma sin la intervención del conductor.

El diseño, tal como muestran las imágenes, es espectacular, y aunque se trata todavía de un prototipo, anuncia una línea muy atrevida en la que se combina un amplio espacio interior, una buena visibilidad y múltiples detalles para adaptarse a las necesidades familiares y profesionales en los desplazamientos por carretera y fuera de ella. “Este SUV parece perfectamente fabricado a partir de un único bloque sólido. El ID ROOMZZ propulsado por baterías se mueve sin esfuerzo, de forma silenciosa y sin emisiones”, explica Klaus Bischoff, diseñador jefe de la marca Volkswagen.

La novedad más destacada la encontramos en el interior, un espacio variable que se puede configurar para adaptarse a las necesidades de sus ocupantes en cada momento y dependiendo del modo de conducción elegido. Cuando el conductor selecciona el modo de conducción totalmente automática (nivel 4), los asientos individuales pueden rotar 25 grados hacia dentro para permitir una atmósfera más comunicativa a bordo, como si fuera el salón de una casa, posibilitando también que los asientos pasen de una posición vertical a una más reclinada.

En el panel de instrumentos completamente digital, el cockpit y el volante parecen flotar delante del conductor. Los materiales empleados son innovadores, como por ejemplo las fundas de los asientos, hechas en AppleSkin, un producto realizado a partir de una materia prima renovable, empleando recubrimientos de madera especialmente procesada en determinadas zonas del habitáculo, como los paneles de las puertas.

Será un coche completamente eléctrico, movido por dos motores que tienen una potencia total de 225 CV que se transmite al asfalto mediante un avanzado sistema de tracción integral 4Motion, permitiendo un paso de 0 a 100 km/h en 6,6 segundos y una velocidad máxima de 180 km/h que está limitada electrónicamente. La batería de 82 kWh proporciona una autonomía de 450 kilómetros según el ciclo de homologación WLTP (475 según NEDC para el mercado chino) y cuenta con un sistema de carga rápida de 15 kW (DC) repone la energía al 80% de su capacidad en 30 minutos.