Consumo

Cómo afrontar la «cuesta de enero», según Consumur

La Asociación de Consumidores y Usuarios en Red incide en la necesidad de reducir al máximo los costes para evitar «sorpresas»

No somos pobres, ahora es que somos tacaños
No somos pobres, ahora es que somos tacañosRicardo Rubio / Europa PressEuropa Press

Moderar el consumo y ser precavidos ante los créditos rápidos son algunas de las estrategias par afrontar con éxito la pesada «cuesta de enero».

«Es muy importante el hecho de que las familias aprendan a valorar la necesidad de moderar el consumo, así como tener precaución ante el espejismo de los créditos rápidos de pequeña cuantía y elevados intereses, ya que aunque representan una solución a corto plazo para satisfacer necesidades o deseos puntuales, pueden convertirse en un problema para numerosas familias que ya tienen elevados niveles de endeudamiento».

Así alerta la Asociación de Consumidores y Usuarios en Red (Consumur) sobre los peligros que conlleva un consumo excesivo después de los numerosos gastos de las fiestas navideñas.

Con el objetivo de ayudar a las familias, Consumur ha elaborado una serie de consejos para ahorrar en este periodo que inciden en la necesidad de reducir al máximo los costes. «Para evitar sorpresas, es preferible ajustar los gastos a su nivel de ingresos y, en la medida de lo posible, crear un colchón monetario».

También hay que tener en cuenta que la diferencia entre los ingresos y los gastos mensuales es el dinero del que se dispone para asumir nuevas deudas, pagos a plazos y compras con tarjeta, entre otros. Las deudas, por encima de esa cantidad, provocarán una situación previa de endeudamiento.

Se han de racionalizar los gastos fijos. E inciden en que es muy importante aprender a ahorrar en la compra de alimentos, evitando, por ejemplo, la adquisición de productos precocinados, normalmente más caros. Además, sirve para potenciar la cocina tradicional.

Consumur aconseja, en la medida de lo posible, intentar pagar las compras realizadas al contado, evitando el uso excesivo de las tarjetas de crédito. El uso ilimitado de éstas puede generar un consumo compulsivo e irracional en el consumidor.

En este sentido, recuerdan que en el uso de la tarjeta de crédito es conveniente valorar cuántas se tienen y reducir el importe para ahorrar dinero, así como cuotas anuales de mantenimiento.

Y en el caso de la unidad familiar, es conveniente que sus miembros no operen con más de dos cuentas bancarias o entidades financieras, así como tener en cuenta los gastos de mantenimiento de las mismas.

Por otro lado, antes de contratar un préstamo, se han de conocer y valorar detenidamente las condiciones del mismo, como son los intereses, los plazos establecidos, y las cláusulas. Si se va a adquirir un préstamo al consumo, se ha de evaluar previamente en qué medida se incrementan los gastos fijos y la verdadera necesidad del producto o servicio que se va a adquirir, así como estudiar la posibilidad de modificar los tipos de interés mediante otras vías, con el fin de ahorrar intereses y cuota mensual.

Del mismo modo, aconsejan a los consumidores que presten una especial atención a los denominados créditos rápidos o de dinero Express. Ese tipo de créditos suelen cobran unas elevadas comisiones e intereses, por lo que acaban saliendo mucho más caros que los préstamos habituales al consumo.