Opinión

Juncker y Trump

Las relaciones comerciales con EE UU. Esa es una de las principales preocupaciones que tiene el presidente de la Comisión, Jean Claude Juncker, al comenzar el que será el último curso del mandato del actual Colegio de Comisarios. Está empeñado en que los países miembros de la UE compren más a los norteamericanos, desde soja hasta gas si hace falta, y ese fue uno de los compromisos que adquirió con Trump cuando estuvo en Washington para desbloquear los contenciosos comerciales hace un mes. Los comisarios europeos, a los que resta poco más de un año de mandato, ya que en mayo de 2019 habrá elecciones al Parlamento Europeo y después cada país designará su candidato a formar parte de la nueva Comisión, que debería entrar en funcionamiento en noviembre de ese año, están preocupados también por lo que consideran deriva autoritaria en algunos Estados miembros del este, como Polonia y Hungría; será otro de los asuntos que se abordarán durante los próximos días en el transcurso del seminario de reflexión que celebran cada año los comisarios.

Los problemas derivados de la inmigración, que este verano han afectado sobre todo a los países del sur, como España e Italia, tampoco escaparán al análisis de los todavía comisarios, lo mismo que el Brexit. La negociación con los británicos no ha avanzado en los asuntos más importantes, como Irlanda, las relaciones comerciales y de mercado y los aspectos financieros, a pesar de que marzo está prácticamente a la vuelta de la esquina. Se presenta un curso apasionante, complicado con las citas electorales.