Menos IVA, más turismo

¿Qué pasaría en Arabia Saudí si al ministro del Petróleo le diera por asegurar públicamente que el oro negro es un negocio «precario, estacional y con bajo valor añadido»? Teniendo en cuenta que es un reino feudal, una dictadura sanguinaria, gozaría de las mismas posibilidades de seguir con vida que usted de ganar el Euromillón. En cualquier caso, cualquier saudí con dos dedos de frente defendería una actividad que les permite ostentar la vitola de gran potencia económica y que garantiza unas más que razonables dosis de prosperidad al ciudadano medio. Nuestro petróleo es el turismo: aporta el 15% del PIB, unos 190.000 millones en números redondos. Por eso se me antojan casi un delito de alta traición las palabras del ministro de Consumo, Alberto Garzón, en el Congreso cuando propuso que se mate lentamente el turismo porque es una fuente de riqueza «precaria, estacional y con bajo valor añadido». Vamos, que vino a plantear que se haga de España un gran Silicon Valley, como si eso fuera coser y cantar, como si esos cambios de modelo productivo se pudieran ejecutar de la noche a la mañana. Hay que ver el daño que ha hecho Silicon Valley en las infantiloides mentes de algunos izquierdosos patrios. Es obvio que el turismo en España es estacional porque esto no es República Dominicana o Florida, donde siempre hace buen tiempo. De la «precariedad» y del «bajo valor añadido» ni hablamos, más que nada, porque hay millones de familias que viven razonablemente bien gracias a los 80 millones de visitantes que arribaban a España cada verano. En lugar de vomitar chorradas, lo que debería hacer este Gobierno es ponerse las pilas. Por ejemplo, imitar a Merkel, que ha bajado el tipo general del IVA del 19% al 16% y el reducido del 7% al 5%. Eso sería un gancho para ilusionar a los millones de extranjeros que dudan por los rebrotes y por la inempeorable fama que ha contraído España por la gestión del virus. Servidor es contrario a las ayudas públicas, pero viendo que Alemania ha pegado un manguerazo de 9.000 millones a Lufthansa, Francia de 8.000 a Air France y que Italia dará 500 euros a cada familia que veranee en el país, me da que algo han de hacer nuestros inútiles gobernantes. En lugar de echar queroseno al fuego, no estaría de más que se planteasen sofocarlo con agua antes de que sea demasiado tarde.