Cambio Android por iPhone

Sí, cuesta reconocerlo, pero probarlo mereció la pena. Reticente al principio, pues la admiración por los dispositivos Android de última generación como el Galaxy o el Nexus era elevada, me deje convencer para tener entre mis manos un iPhone (sí ese que todo el mundo ahora tiene, pero quizás no sabé por qué). Pues bien, después de unos meses con él creo haber descubierto no sólo sus debilidades (que confieso era mi objetivo primero) sino las razones por las que no quiero deshacerme de él.

En realidad esto es como una guerra entre Windows y Apple, pero en este caso más cruel y diversificada. Como ya había pasado por esto antes, sabía a lo que me enfrentaba: aprendí a manejar ordenadores con un Mac, hasta que la masa me hizo usar un PC... en fin... Volver a usar un sistema de la casa de la "manzanita"me hizo recordar porqué son tan buenos en lo que hacen, al margen de críticas y fallos, que todos comparten.

Así puedo resumir en 10 razones por qué cambio Android por iPhone:

Sistema Operativo. El iOs5 va fenomenal y apenas se le pueden achacar fallos. No se "encasquilla", como los nuevos Android y no precisa la conexión a un ordenador para hacerlo. Simplemente avisa, aceptas y en unos minutos está listo para usarse sin tener que hacer copias de seguridad, ni nada parecido... ÉL SE ENCARGA DE TODO

iCloud. O más conocida como la nube de la manzana, tiene en todo momento una copia de seguridad de el dispositivo en su totalidad. Un alivio en caso de pérdida o que uno tenga que cambiar de terminal por cualquier problemilla. Si uno supera la cantidad puede comprar más espacio a un precio razonable.

¿Pagar por todo? Esta era una de las pegas que mucho ponen. Las mejores Apps son de pago, o ¿no? Para usar un dispositivo, sea el que sea, es necesario informarse e indagar hasta el último blog para sacarle el mayor partido posible (por eso no todo el mundo debería tener un buen móvil si no le saca el 100%). Existe una app gratuita AppGratis con una oferta diara de una aplicación de libre acceso y que normalmente cuesta de uno a dos euros. Merece la pena tenerla.

Tamaño. Ideal. Puede que otros ofrezcan una pantalla con un par de pulgadas más. ¿Para qué? Bolsos, bolsillos... hasta los dedos agradecen sus 3,5 pulgadas.

Fotografías. Es el principal reclamo del dispositivo. Uno piensa, ya como todos... Hasta que no lo ve, no se da cuenta de que sus fotos podrían ser publicado hasta en la portada de un periódico.

Sencillo. No hay enrevesados menús y hasta un niño de dos años puede colocarse su serie favorita sin ayuda de los padres.

Pantalla. Como ocurre con el iPad, da gusto deslizar el dedo por su pantalla, sin que haya que "rascar o pulsar"para acceder a la aplicación o a la orden.

Música. Con el iTunes o el Spotify se disfruta de la música tanto gratuita como de pago. "Estando al loro"de las ofertas de la principal aplicación del iPhone puede ahorrar unos eurillos. Y, por qué no pagar de vez en cuando una cantidad irrisoria por un álbum de tu artista favorita en vez de tener otro programa que lo descargue y luego haya que copiarlo a la biblioteca... Seamos legales.

Recordatorios. Una lista de la compra o una tarea. Un cumpleaños o la cita con el dentista. ¡Qué no se olvide nada! La sincronización con los principales proveedores de correo, vamos con Gmail o Hotmail, es perfecta. Por lo que uno puede mantener los calendarios y las citas, sin crearse una cuenta con iCloud si no quiere.

Siri. En cuanto llegue esta nueva aplicación, que convierte al iPhone en el KITT de los móviles. No te podrá llevar a cualquier sitio como el mismo "Coche fantástico", pero sus versiones en inglés (con todos sus acentos), francés, alemán y japonés ya son testigos de la utilidad de que tu móvil te entienda y te conteste, sin necesidad de emplear ni un dedo. Espero con ansia la versión en español.

Seguro que tiene sus fallos, pero tras el primer flechazo esperare para admitirlos...