Mar en calma

¡Buen camino!

Además de la parte más espiritual, esta experiencia significa un salto cualitativo en nuestro crecimiento personal

El camino de Santiago es uno de esos trayectos inspiradores, transformadores y providenciales que siempre nos ofrece pequeños milagros. Uno de los lugares con un significado especial, al menos para mí, es O Cebreiro. Allí, Fray Paco y una oración que reza, entre otras verdades: «Si no he descubierto la libertad de ser yo mismo, no he llegado a ningún sitio», te abrazan el alma y el cansancio desaparece.

Esta visita obligada tanto para pedir como para agradecer, coincidió con la de un grupo de adolescentes canarios con temas pendientes con la justicia. El destino quiso que estuviéramos en el mismo sitio, a la misma hora.

Estas personas que han tenido hasta el momento un camino complicado, han podido recibir la inspiración de un lugar con una energía muy especial, escuchar otros testimonios y ser testigos directos de los pequeños milagros que ocurren en las diferentes etapas del camino.

Todos tenemos, como este grupo canario, situaciones en nuestro pasado de las que seguro no sentimos orgullo precisamente, pero como en el camino, la vida siempre nos ofrece la posibilidad de obrar un reinicio y empezar de nuevo en mayor coherencia con los valores humanos.

Aparte del esfuerzo que conlleva el cumplimiento de todas las promesas que culminan en la catedral de Santiago, vamos descubriendo a cada paso la fuerza de la hospitalidad, la generosidad, la amistad, la ayuda mutua, la solidaridad… El camino nos ayuda a entrar en nosotros mismos, a escucharnos y a autoconocernos.

Además de la parte más espiritual, esta experiencia significa un salto cualitativo en nuestro crecimiento personal.

Gracias un año más, ¡y van ya 18! a la Fundación También y a las personas con discapacidad que se aventuran a llevarlo a cabo, porque, con el apoyo de Alsa y Fundación Aon, habéis obrado milagros: algunos se han reconciliado con la vida, otros han podido cargar pilas y absolutamente todos los que acudimos, volvemos llenos de optimismo y buenos sentimientos.