¡Ave, «César» Neymar!

L15 Gesto

Ayudar al prójimo. Amar al prójimo. Lo de Messi con Suárez, al pasarle el balón en el lanzamiento del penalti «indirecto» para ayudarle a ganar, contra Cristiano, el Pichichi. Su gesto, por insólito, ha dado la vuelta al mundo, y es que el mundo, ni se dude, está necesitado de acciones tan generosas como ésta.

–A ver si la Liga de los partidos políticos –me comenta Hernán San Pedro– aprende de la Liga de los partidos de fútbol.

–No me seas críptico.

Me aclara:

–A los jugadores del Barça, como ha demostrado una vez más el tridente, ¿qué es lo que les importa? El Barça. La solidaridad y el admirable todos con todos y para todos por el bien y el éxito del Barça ¿Qué es la Liga de los partidos políticos? Un sinsentido aritmético: una Liga en la que los perdedores pretenden ganar lo que onerosamente perdieron en las urnas. ¿Cómo se deglute eso democráticamente?

X17 Lealtad

Esto de ser español o presumir de ser español, para algunos, empieza a ser baldón. ¿Por qué juega Piqué en la Selección española? Su respuesta: «La selección es la “rehostia”, y yo , de momento, soy español». O sea, que es español para poder jugar en la Selección, que si no, no, toda vez que él, hace tiempo, se declaró «catalán soberanista», y de ahí que «en el resto de España» (que se dice rupturalmente), cuando viste la camiseta de la Selección, miles de hispanos le piten a pleno pulmón. ¿Sabe Pedro Sánchez qué es España? Quiero pensar que sí; pero ayer, en la televisión, dijo dos o tres veces «Cataluña y España», como si Cataluña no fuese España. España, como tampoco ignora nadie, es un «conglomerado» plurinacional para Pablo Iglesias. Luego España, a este paso, y por exclusiva obra de los «políticos progresistas», acabará siendo un fangoso batiburrillo plurinacional. Más claro: «¡La rehostia!»

J18 Besitos

La Champions es el Toisón de Oro, o el Oscar, o el Goya, o el Príncipe de Asturias, o el Nobel, o la «rehostia» del fútbol. Lo que más de lo que más. El Real Madrid, eliminado de la Copa por borrón administrativo y a siete puntos del Barça de la Liga, qué rabia y qué dolor, no tiene más cima celestial para no caerse de la Gloria que intentar ganar la Champions. No hay que desdeñar por lo tanto, admirado Cristiano, el buen rollo de los besitos y los abracitos. El tridente azulgrana es poderoso no sólo por su talento, también por los besitos y abracitos. Tú mismo, CR7, ¿cómo celebraste tu colosal gol al Roma? Con besitos y abracitos a Zidane. Luis Enrique proclama que el Barça es amistad; Simeone, que el Atlético es una familia, y Zidane, que «lo importante es la unidad del grupo». Resumiendo: que el fútbol, para que funcione y reparta alegrías, jamás debe caer en la nefasta tentación de mirarse en el espejo de «nuestra» insolidaria y egoistona casta política.

V19 Valdano

Coincide una vez más Valdano conmigo y yo con Valdano. El Barça no es Luis Enrique, es Messi. Escribí hace poco aquí que Luis Enrique, de haber seguido en el Celta, no hubiera sido elegido áureo entrenador FIFA de 2015. Es el jugador, casi siempre, el que hace al entrenador. El Real Madrid de las cinco copas europeas de Santiago Bernabéu no hubiera sido el Real Madrid de las cinco copas europeas consecutivas de Santiago Bernabéu sin Di Stéfano. Lo cual, por supuesto, no resta méritos al trabajo técnico, psicológico y ejecutivo del entrenador. Dice también Valdano en sus declaraciones, siempre interesantes, a «Mundo Deportivo», que no se imaginaba de entrenador a Zidane. Y augura diez años de diversión a quien tenga en su vestuario a Neymar.

Me lo dice quien me lo dice:

–Neymar, pronto, va a ser «objeto de deseo» de tres equipos. Es el «Ave, César» del fútbol.